Una serie de salidas en la alta dirección de Telefónica Chile -controladora de Movistar en el país- se han generado durante los últimos meses, justo en momentos en que la compañía enfrenta rumores de venta.
En solo seis meses, al menos tres ejecutivos históricos han dejado la firma, incluyendo al presidente ejecutivo, en medio de un complejo contexto financiero y de reestructuración global del grupo.
En primer lugar y en lo más reciente, el pasado 28 de mayo se confirmó la renuncia de Roberto Muñoz, presidente y CEO de Telefónica Movistar Chile, quien estuvo 13 años en ese cargo y 20 años en la compañía.
"Se retira para asumir nuevos retos profesionales", informó oficialmente la empresa, aunque su salida coincide con los movimientos internos ligados a una posible venta de la filial.
Su reemplazo fue anunciado de inmediato: Juan Vicente Martín Fontelles, ejecutivo español con una extensa trayectoria en el grupo, quien asumió el cargo el 1 de junio.
Días después, el 6 de junio, se sumó la salida de Rafael Zamora, director de Finanzas y Control de Gestión, con 33 años de trayectoria en Telefónica.
"Con fecha 5 de junio del año en curso, el señor Rafael Zamora Sanhueza comunicó su decisión de renunciar al cargo de director de la compañía, para enfrentar nuevos desafíos profesionales. Dicha renuncia produjo efectos a las 24 horas del día de ayer", dijo Telefónica Móviles Chile y Telefónica Chile en la noche del viernes 6 de junio a través de un hecho esencial en la Comisión para el Mercado Financiero (CMF).
Zamora se sumó al Grupo Telefónica en 1991 y entre sus principales cargos, fue director de Estrategia y Control de Gestión, director de Negocio Residencial Fijo (B2C), director de Negocio Corporativo Fijo (B2B), director de Estrategia y Regulación, y director de Recursos Humanos.
A esto, se suma la salida de un alto ejecutivo de la compañía que se concretó en diciembre del año pasado: Fernando Saiz, quien se desempeñaba como director de Asuntos Públicos y Regulación, y estuvo 31 años en la firma.
No obstante, según da cuenta Pulso, Sainz está actualmente estudiando Teología, lo que sería un antiguo sueño personal. Por eso, al interior de la firma no vinculan su salida al eventual proceso de venta y los cambios internos.
Estas salidas ocurren en medio de los rumores de venta de la filial de la compañía en Chile, lo que ha sido negado por el gigante hispano de la telefonía. La firma ha ido vendiendo sus operaciones en Latinoamérica, como su filial en Uruguay, Argentina y Colombia.
Hace algunas semanas trascendió en medio españoles que la compañía sumó a Citi como banco mandatado a vender el activo chileno, en una operación que, de acuerdo a algunas estimaciones, podría ascender a 1.000 millones de euros.
Entre los interesados se mencionan nombres como América Móvil, Millicom, Entel e Integra Tec.
Fue en mayo que el Estado español, por medio de su brazo de inversiones Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), culminó de comprar un 10% del grupo Telefónica, gastando casi US$2.500 millones, volviendo a la propiedad del grupo después de 27 años.
Lo anterior, por un plan del gobierno de Pedro Sánchez por tener mayor presencia en el accionariado de empresas estratégicas que lanzó en enero para "garantizar la seguridad nacional".
En enero fue nombrado Marc Murtra como presidente global de Telefónica, quien fue propuesto por la SEPI estatal y apoyado por accionistas clave como los grupos CriteriaCaixa y BBVA.