Una fuerte caída registró la Bolsa de Comercio de Santiago este martes, en una sesión marcada por las advertencias de referentes de Wall Street respecto a que el mercado bursátil estaría sobrevalorado y anticiparon fuertes caídas.
El IPSA, principal índice de la plaza local, cayó 2% hasta los 9.322,90. Se trata de su peor sesión desde inicios de abril, cuando Donald Trump sacudió a los mercados mundiales al anunciar sus aranceles "recíprocos".
La bolsa chilena venía de encadenar sesiones brillantes, anotando en las cuatro últimas sucesivos récord.
Los grandes perdedores de la jornada fueron los papeles de SQM-B (-6,01%), CMPC (-2,8%), Falabella (-2,78%) y Latam (-2,71%). Mientras que los títulos de Quiñenco y SMU lideraron las alzas, con avances de 1,62% y 1,56%, respectivamente.
En Wall Street, en tanto, el Nasdaq perdía 1,84%, el S&P 500 retrocedía 1,08% y el Dow Jones cedía 0,55%. En tanto, los rendimientos del Tesoro de Estados Unidos cayeron y el dólar se fortaleció a nivel mundial, como resultado de la búsqueda de refugio.
Un coro de altos ejecutivos de Wal Street advirtió este martes a inversionistas que se preparen para una corrección ante las elevadas valoraciones de algunas acciones, sobre todo las ligadas a la Inteligencia Artificial. Esto, en medio de la preocupación que ya existía respecto a un mercado supuestamente sobrevalorado.
Las ganancias corporativas son sólidas, pero "lo que resulta desafiante son las valoraciones", dijo Mike Gitlin, quien supervisa alrededor de US$3 billones como presidente y director ejecutivo del gestor de inversiones Capital Group, durante una cumbre financiera organizada por la Autoridad Monetaria de Hong Kong este martes.
Sus opiniones fueron compartidas por Ted Pick, CEO de Morgan Stanley, y David Solomon, de Goldman Sachs Group Inc., quienes también ven la posibilidad de una venta masiva significativa en el próximo período y afirmaron que los retrocesos son una característica normal de los ciclos del mercado.
"Deberíamos acoger con satisfacción la posibilidad de que se produzcan caídas del 10 al 15% que no estén impulsadas por algún tipo de efecto de precipicio macroeconómico", dijo Pick, calificando eso de "un desarrollo saludable".