René Ureta, el nuevo jefe del Departamento de Finanzas de Carabineros (a la izquierda), junto al general director, Bruno Villalobos.
Francisco Águila.
SANTIAGO.- "Hubo vulneración del control jerárquico y falta a la ética", señaló el general René Ureta, el nuevo jefe del Departamento de Finanzas de Carabineros, acerca de algunas de las causas que permitieron el megafraude en la institución por parte de ex funcionarios, que ya supera los 17.500 millones de pesos.
El alto jefe policial expuso ante la comisión investigadora parlamentaria por la millonaria malversación y reveló algunos de los cambios que está haciendo la institución, entre las que se cuentan incluso cambios físicos en las oficinas donde operaba el grupo de oficiales de Intendencia que perpetraron el ilícito.
"Se está realizando incluso cambios físicos en los departamentos de Finanzas con áreas libres para la fiscalización visual. También cambiamos las claves de acceso", sostuvo Ureta.
El general agregó que hace un mes que Carabineros están siendo auditados por la Contraloría General de la República y que se están realizando cambios en un sistema informático para evitar nuevas estafas y la creación de un departamento que se encargue de las auditorías internas y externas.
"Lo que más sentimos es la baja en la confianza en Carabineros. Esto ha sido un golpe. Sabemos que la única forma de revertirlo es trabajando con la comunidad", añadió.
En tanto, el presidente de la instancia parlamentaria, el diputado DC Jaime Pilowsky, solicitó una serie de oficios a Carabineros.
Entre ellos todas las auditorías realizadas a la institución desde el año 2004, así como también las fiscalizaciones y sumarios internos desde ese mismo año.
También solicitó un oficio acerca de gastos reservados en la institución, las reparticiones y los funcionarios encargados de ellas, así como las observaciones que haya hecho la Contraloría sobre este ítem.
Asimismo, solicitó las destinaciones y trabajos de cada uno de los implicados en el megafraude.
