Día Mundial del Medio Ambiente: Los desafíos que marcan la jornada de reflexión sobre el estado del planeta
Si bien esta edición lleva un lema que apunta a la crisis de los plásticos, de los cuales menos de un 10% se recicla, son varios los problemas que la humanidad debe abordar en la forma en que interactúa con los ecosistemas.
El lema oficial del Día Mundial del Medio Ambiente 2025 es "Sin contaminación por plásticos": un llamado, según fuentes de la ONU, a gobiernos, sector privado y ciudadanos para amplificar y aplicar medidas que permitan resolver este problema, uno de los más acuciantes hoy día en el sector ambiental.
En el último medio siglo, la degradación de los ecosistemas, fundamentalmente debido a las actividades humanas, ha colocado los problemas ambientales en primera línea a medida que sus efectos se hacían cada vez más visibles: problemas de suministro de agua, exceso de temperaturas, encarecimiento de productos básicos o limitaciones de transporte, entre otros.
Los problemas medioambientales son muchos, pero los más importantes según distintos especialistas son:
Contaminación del aire, el agua y los suelos
El lema de este año hace referencia a los más de 400 millones de toneladas de plástico que se producen a nivel mundial.
De esta cantidad, menos de un 10% se recicla.
Se estima que unas 11 millones de toneladas terminan cada año en lagos, ríos y mares.
Esto equivale a 1.089 veces la Torre Eiffel.
Especialmente problemáticos son los microplásticos, partículas de diámetro inferior a 5 milímetros.
Un trabajador en un depósito para reciclaje en Jalandhar, India. | AFP
Estas partículas están presentes en bebidas, las que ingeridas e incluso aspiradas, terminan en el interior del cuerpo humano.
La cantidad de microplásticos en los mares superan el número de estrellas en nuestra galaxia.
Uno de los desafíos en la material es reducir la utilización de productos plásticos de un solo uso, que terminan rápidamente en la basura y contaminan todo tipo de ecosistemas.
Se estima que el costo social y ambiental de la contaminación plástica oscila entre 300.000 y 600.000 millones de dólares.
Deterioro de la biodiversidad
Flora y fauna son esenciales para la supervivencia humana y no solo es importante preservar el oso panda u otras especies icónicas.
Los expertos dicen que cada vez que se pierde una especie, aunque no sea particularmente conocida, desaparece un ladrillo de la edificación natural.
La pérdida de demasiados "ladrillos" puede hacer que el edificio entero se derrumbe.
La tasa media oscila entre una y dos especies desaparecidas anualmente.
Aumento de especies exóticas invasoras
Este problema ha crecido exponencialmente en los últimos años.
Es algo que ha aumentado ha medida que la globalización ha perturbado el frágil equilibrio ecosistémico.
Las cotorras argentinas, de gran adaptación climática, han llegado a lugares tan diferentes como Chile, Reino Unido y Marruecos. | Aton
Las especies invasoras erradican o destruyen a las locales.
Un ejemplo es el de los visones americanos, en perjuicio de los visones europeos.
Estas especies amenazan incluso a la salud humana, como sucede con la proliferación de insectos del tipo mosquito tigre.
Sobreexplotación de los recursos naturales
La codicia de algunas grandes empresas multinacionales y de políticos sin visión de futuro impulsa la destrucción sistemática de entornos naturales.
Desde la deforestación de espacios amazónicos hasta el agotamiento de bancos pesqueros atlánticos o la contaminación minera que ahora amenaza también a las regiones polares.
Esta sobreexplotación no se detiene ni siquiera ante la vida humana: entre 2012 y 2023 fueron asesinados más de 2.000 defensores ambientales.
De esta cifra, ocho de cada 10 fueron asesinados en países iberoamericanos.
Producción excesiva y manejo inadecuado de residuos
La sobreexplotación conduce a un consumo desaforado.
Por ejemplo, en España una persona compra una media de 34 prendas anualmente, aparte de las que acumulaba en sus armarios.
Vertedero de ropa en Alto Hospicio, Chile. | AFP
Para intentar resolver los inconvenientes creados por un volumen creciente de residuos nace el concepto de economía circular.
Esta forma de pensar la economía busca convertir lo desechado en nuevos recursos para otros usos.