EFE
Irreparables daños al sistema nervioso e inmunitario, el aparato digestivo, la piel, los pulmones, los riñones y la visión, es lo que puede ocasionar la exposición prolongada al mercurio, un elemento altamente tóxico para los seres vivos y que actualmente está presente en casi todos los ámbitos de nuestra vida, desde alimentos hasta en las amalgamas dentales, aquellas tapaduras grises que posee gran parte de la población.
En nuestro país también podemos encontrar esta toxina en los suelos, como elemento o metálico -pudiendo ser inhalado por trabajadores al ser desprendido en procesos industriales, como la minería-, inorgánico -en forma de sales- u orgánico, como el metilmercurio, que penetra en el cuerpo humano por vía alimentaria, a través del consumo de pescados y mariscos contaminados.
Ciertamente en Chile, la extracción de oro artesanal ha sido uno los trabajos sin controles técnicos con mayor exposición al mercurio, razón por la cual en el 2013, nuestro país firma el Convenio de Minamata sobre Mercurio, impulsado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), que trata temas en relación al control de emisiones de este elemento.
Este convenio prohíbe por ejemplo, el uso de mercurio en la fabricación, comercialización, importación y exportación de productos con este elemento añadido como baterías, ampolletas, cosméticos, pesticidas o termómetros, además de regular, disminuir y eliminar su uso en amalgamas dentales, ya que no existe un nivel de mercurio inocuo para el organismo, puesto que cada partícula de esta sustancia es tóxica y tiene la habilidad de permanecer en nuestro organismo durante décadas.
Lamentablemente para muchos, la zona bucal es un tema aparte del bienestar físico y su salud, pero están muy equivocados, puesto que todo lo que se introduce en la boca afecta directa o indirectamente a nuestro cuerpo. Incluso las pequeñas amalgamas de los dientes pueden estar silenciosamente intoxicándonos, por lo cual es muy importante tomar conciencia del tema, un trabajo que ya lleva varios años realizando la Academia Internacional de Medicina Oral y Toxicología, cuyo objetivo es concientizar a la población y a profesionales de la salud acerca de los problemas que conlleva el mercurio y cómo debe ser eliminado de las bocas sin riesgo.
A raíz de diversos estudios e informes internacionales, la Organización Mundial de la Salud ha declarado al mercurio como uno de los diez productos o grupos de productos químicos que plantean especiales problemas de salud pública, vislumbrándose a futuro su completa erradicación.
Saludos,
Claudia Marín Diez, Licenciada en Odontología de la Universidad de Chile, presidenta de la Academia Internacional de Medicina Oral y Toxicología en Chile.