El
coronavirus (Covid-19) tiene a autoridades y ciudadanos de todo el mundo en alerta ante eventuales contagios, y a nivel global se han tomado diversas medidas, para
evitar que el brote se siga propagando con más fuerza. En este sentido, las autoridades sanitarias han insistido en la importancia que tiene el hecho de que las personas en riesgo de contagio y las ya diagnosticadas, respeten las medidas de cuarentena y aislamiento. Para ello se ha hablado mucho en los últimos días de la llamada
"curva de aplanamiento" del coronavirus, que básicamente apunta a que muchas personas no se infecten al mismo tiempo.
Para los especialistas, si bien es imposible impedir que el Covid-19 circule, sí se puede hacer más lenta su propagación y evitar llegar peaks repentinos. Según explicaron médicos norteamericanos a
The New York Times, al lograr eso se reduce el número de casos activos en un momento dado, lo que a su vez
da tiempo a los médicos, hospitales, escuelas y fabricantes de vacunas, entre otros, para prepararse y poder responder sin colapsar, señalaron.
Cabe destacar que según publicó la revista Time esta semana,
cuarentena es un término que
apunta a mantener a las personas que parecen estar sanas, pero que son sospechosas o que podrían tener la enfermedad, alejadas del resto. En tanto, el
aislamiento se aplica cuando alguien es diagnosticado y por esto es apartado de los demás para evitar que contagie a otros, como por ejemplo ocurre actualmente con el actor Tom Hanks.
Qué pasa en Chile
Ricardo Espinoza, infectólogo de Clínica Las Condes, ahondó
en la importancia que tiene para el sistema de salud, el respetar las medidas de aislamiento y cuarentena que se les aplica a las personas, enfatizando en que si alguien proviene de un país con alto número de contagios -como España o Italia-,
deben quedarse en sus casas a pesar de no tener los síntomas. "La mayoría de los pacientes se enferman entre el tercero y octavo día del período en que adquirieron el virus, pero en algunos puede llegar hasta 14 días", indicó a Emol.
El médico enfatizó que para las personas que se encuentran en esos casos, es fundamental "quedarse en sus casas, abstenerse de invitar a amigos para que lo acompañen, no ir al cine y no salir de su hogar, en caso de tener que pedir comida se puede hacer por delivery (utilizando mascarilla en caso de estar contagiado).
En el mundo actual es más fácil hacer un aislamiento, pero lo importante es la
conciencia de la persona de llevarlo a cabo", sostuvo.
El infectólogo cuenta que ha tenido casos en que personas que llegaron desde uno de esos países le han pedido realizarse exámenes para verificar si tienen el virus, a pesar de no tener síntomas, para poder continuar con sus vidas. Sin embargo, advierte que esto no es factible, ya que si el viajero tiene la enfermedad en muy bajo nivel, no se detectará en el examen, pero sí días posteriores desarrollará la infección, provocando contagios al no haber respetado la cuarentena.
"
Solo con el aislamiento vamos a lograr que la enfermedad no se reparta por Chile", agregó.
Cuarentenas para ayudar al sistema de salud
Espinoza explicó que estamos frente a un virus muy contagioso, "más que la influenza", por lo que si se deja "libre" en pocas semanas se tendrán concentraciones altas de casos. "Las personas no van a tener acceso a salud porque
el sistema va a estar colapsado. El mejor ejemplo es Italia: En (el área) intensiva ya no hay camas, y cuando hay dos personas que necesitan ser conectadas (a una máquina de ventilación mecánica) se tiene que escoger a una de las dos. Ese sistema colapsó", añadió.
"Vamos pronto a ver casos que ya no vienen de afuera, sino que de la comunidad. Pero
si tenemos los casos más repartidos en el tiempo vamos a ser capaces como país de ir absorbiendo a los enfermos, sobre todo los más graves", señaló, agregando que "se necesita el apoyo de la comunidad".
Ante el caso de que un
integrante de la familia esté contagiado y deba cumplir con el aislamiento, el médico destacó que es importante mantener la distancia de un metro y
dejar a la persona "tranquila en su habitación". El doctor explicó que las gotas que salen de la nariz o boca de un contagiado son pesadas y no viajan grandes distancias, por lo que con la primera medida se puede controlar.
"El enfermo tiene que lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón corriente", reiteró el infectólogo, agregando que en caso de asistir a un control médico, el
uso de mascarillas quirúrgicas en la persona enferma es muy eficiente.
