BRASILIA.- Brasil comprará 24 aviones nuevos caza bombarderos para sustituir sus viejos Mirage, como parte de un amplio plan encaminado a modernizar su fuerza aérea, informaron portavoces del gobierno. Brasil destinará 700 millones de dólares a la compra de tales naves, para lo cual tiene en estudio aviones de las empresas sueca Saab, la estadounidense Lockheed Martin y la francesa Dassault. "El objetivo del programa es modernizar y reestructurar los equipos de defensa existentes actualmente en Brasil", dijo a la prensa el ministro brasileño de Defensa, Geraldo Quintao. Quintao adelantó que la selección de los aviones se hará mediante una licitación internacional y garantizó que va a "favorecer a quien tenga el mejor producto". El ministro dio a conocer el programa tras una ceremonia en la que el presidente Fernando Henrique Cardoso autorizó 3.354 millones de dólares para la modernización y reequipamiento de la fuerza aérea, en un proyecto conocido como Plan Fénix. Sin embargo, el ministro dijo que Cardoso pidió hacer un esfuerzo para ahorrar 10 por ciento de tales fondos. La última vez que Brasil participó en un conflicto que requirió el uso de su fuerza aérea fue en la Segunda Guerra Mundial. El presupuesto asignado al programa incluye también 330 millones de dólares para la compra de 76 aviones ALX, de fabricación brasileña, para la vigilancia de la Amazonia. La fuerza aérea brasileña lleva años, pero sus dificultades económicas, que llevaron a la devaluación monetaria de enero de 1999, obligaron a aplazar los planes. Similar suerte corrió Chile, que en los últimos años debió postergar sus planes de invertir 600 millones de dólares para modernizar su flota de caza bombarderos. "Hay una decisi n de renovar sus A-37 y hay un estudio técnico de la fuerza aérea, pero está a la espera de que el gobierno decida cuál modelo va a comprar", dijo en Brasilia el ministro chileno de Defensa, Mario Fernández. Fernández llegó a Brasil como parte de la delegación del presidente Ricardo Lagos, en una viaje que propició la firma de un acuerdo de cooperación militar entre los dos países. El resto de los fondos liberados por el gobierno brasileño se destinarán a otras adquisiciones de aviones y la capacitación de los pilotos.
