BELGRADO.- Elementos clave de las fuerzas de seguridad yugoslavas abandonaban hoy al régimen de Slobodan Milosevic, mientras la oposición serbia tomaba el control de estaciones de radio y televisión y la confusión se esparcía por Belgrado con manifestantes que saqueaban y quemaban el edificio del Parlamento Federal.
La policía serbia, uno de los sostenes del régimen, cambió de actitud y apoya ahora al cambio democrático, declaró Zarko Korac, uno de los líderes de la Oposición Democrática de Serbia (DOS), a la emisora de televisión Studio B de Belgrado.
La policía inicialmente utilizó gas lacrimógeno contra los manifestantes, lo que condujo a estampidas, pero luego permitió el paso de las multitudes. Algunos agentes desecharon sus escudos y cascos y se unieron a las protestas.
Mientras caía la tarde había confusión sobre quién ejercía el poder, al tiempo que cientos de miles vivaban al candidato presidencial de la DOS, Vojislav Kostunica, quien afirmó que toda Serbia quería que el presidente yugoslavo Milosevic se vaya.
"No necesitamos ni a Washington ni a Moscú", dijo Kostunica en medio del repetido grito de la multitud de "Victoria, victoria". "En estas victoriosas elecciones los hombres eligieron paz entre nosotros los serbios y la paz de Serbia con el mundo, pero hay un hombre que está en contra y que causó temor y guerra", expresó.
Por eso perdió las elecciones y por eso falseó sus resultados, explicó. La multitud respondió "está acabado", y reclamó que Milosevic sea arrestado.
Kostunica convocó además al nuevo Parlamento federal yugoslavo surgido de las elecciones para su primera sesión, informó la emisora B2-92.
Inicialmente la policía de elite no había mostrado señales de complacencia, y se enfrentó con los manifestantes frente al edificio de la televisión estatal serbia (RTS). Se dispararon tiros, pero no hubo víctimas. La mayoría de las personas se vio afectada por el gas lacrimógeno.
Luego la violencia se convirtió en celebraciones, mientras manifestantes y policías se abrazaban y besaban. La multitud era tan grande que las brigadas de bomberos no pudieron atravesarla para llegar hasta el Parlamento en llamas.
RTS salió del aire a principios de la tarde, mientras el fuego se expandía por sus estudios, que ya resultaron severamente dañados el año pasado por los bombardeos de la OTAN.
Las fuerzas de oposición tomaron el control de otro canal de televisión, Studio B, e indicaron que la policía se había rendido allí sin ofrecer resistencia y se había retirado al quinto piso. La estación fue nacionalizada el año pasado tras constituirse en un bastión opositor.
Cuando la estación "liberada" volvió al aire, uno de los primeros invitados al estudio fue un ex asesor de Milosevic, Zvonimir Trajkovic, quien afirmó que las "nuevas autoridades" obviamente ya estaban comenzando a asumir el control.
El popular periodista opositor Marko Jankovic apareció ante las pantallas alrededor de las seis de la tarde (local) para decir al pueblo que no se inquietara. "Las fuerzas de seguridad están con el presidente, con Vojislav Kostunica", dijo.
Integrantes de la DOS instaron a la multitud en Belgrado y otros lugares a permanecer en calma y no buscar revancha.
ASALTO AL PARLAMENTO
El Parlamento federal yugoslavo resultó severamente dañado por el fuego, desatado luego de que manifestantes asaltaran el edificio y cientos de personas salieran del edificio llevándose computadoras, sillones, alfombras y otros productos del saqueo. Otros optaron por arrojar libros y cuadros de Milosevic desde las ventanas o flamear banderas serbias desde los balcones.
La manifestación había sido convocada para exigir la renuncia de Milosevic, quien según la DOS fue derrotado en las elecciones del 24 de septiembre por Kostunica. El uso de la fuerza no parecía haber sido planeado.
Cientos de miles de personas convergieron a la ciudad desde todo Serbia para participar en la protesta organizada por la coalición opositora. Testigos señalaron que fueron vistos tanques que se dirigían hacia el Parlamento cuando la violencia se iniciaba, pero nunca arribaron.
Entretanto, se desconocía el paradero de Milosevic, quien no fue visto hoy en público ni por televisión.
Antes de salir del aire, la televisión estatal reportó que el "terror de la DOS y el caos" reinaban en las calles de Belgrado. Afirmó que "extremistas" de la DOS golpeaban infundadamente a personas inocentes. Luego simplemente se limitó a difundir música clásica.
Los dirigentes de la coalición DOS rechazaron previamente un anuncio del Tribunal Constitucional Yugoslavo anulando la primera rueda de las elecciones, diciendo que Kostunica había ganado los comicios.
El presidente del Tribunal Constitucional, Milutin Sdric, explicó hoy que los comicios no eran válidos y que debían ser realizados nuevamente. El DOS aseguró que Kostunica había ganado y no participaría en otras elecciones.
El tribunal, dijeron, debió haber establecido quien había sido responsable de "robar" el triunfo opositor en la primera rueda y haber ordenado el recuento de los votos.
El jerarca de la iglesia ortodoxa serbia, el patriarca Pavle, reconoció también el triunfo electoral del opositor Kostunica y apeló al Ejército y la Policía a posibilitar un traspaso pacífico y civilizado del poder en Yugoslavia.
Al mismo tiempo, instó al gobierno y la oposición no permitir choques violentos ni derramamientos de sangre.