WEST PALM BEACH, florida. - Un camión alquilado con casi 463.000 papeletas electorales que podrían ayudar a decidir al ganador de la Casa Blanca salió este jueves del condado de Palm Beach, bajo escolta policial, hacia un tribunal en la capital del estado de Florida, Tallahassee.
Las papeletas, cruciales para las esperanzas del vicepresidente Al Gore de revertir la ventaja de 537 votos que tiene el republicano George W. Bush, van dentro de 162 cajas metálicas en un recorrido de ocho horas y 720 kilómetros.
Un juez estatal en la capital de Florida ordenó a los condados de Palm Beach y Miami-Dade que le enviaran a su tribunal más de 1,1 millones de papeletas presidenciales, para que decida si es necesario ordenar otro recuento en los dos condados.
Gore había pedido al juez del condado de Leon, N. Sanders Sauls, ordenar que 14.000 papeletas en los dos condados, en las cuales las máquinas automáticas no pudieron detectar un voto para presidente, sean sujetas a un recuento manual e incluidas en los resultados electorales de Florida.
Algunas de las papeletas tienen semiperforaciones que pueden ser detectadas por el ojo humano, pero no fueron incluidas en la certificación estatal que dio a Bush la ventaja de 537 votos, de entre el total de seis millones de sufragios emitidos en Florida.
Gore confiaba en recoger los votos suficientes como para superar a Bush y proclamar su conquista de la presidencia. Pero los abogados de Bush dijeron que cualquier recuento debería incluir todas las papeletas emitidas en los dos condados: casi 654.000 en Miami-Dade y 463.000 en Palm Beach. Tanto Bush como Gore necesitan que se les adjudique el voto popular en Florida para hacerse con los 25 votos que el estado confiere para el Colegio Electoral. Sauls no decidirá hasta el sábado si las papeletas serán contadas a mano, pero ordenó el miércoles que todas le sean llevadas a Tallahassee, en caso de que fuera necesario.
El camión alquilado salió de las oficinas del condado de Palm Beach a eso de las 08.00 locales (13.00 GMT), con un carro patrulla policial al frente y seguido por otro sin insignias. En la oficina electoral de Miami-Dade, la operación fue demorada por las quejas de observadores partidistas de que los trabajadores de la oficina estaban manipulando de manera burda las papeletas, rechazadas por funcionarios del condado.
El equipo de armas y tácticas especiales de la policía de Miami-Dade (SWAT) se encargará de trasladar el viernes las papeletas en un viaje de 10 horas hacia Tallahassee.