JERUSALEN.- El Primer Ministro israelí, Ehud Barak, dijo este jueves que su país "no se rendirá ante la violencia palestina y no recibirá dictados". Barak hizo tal afirmación durante una reunión con visitantes extranjeros, a los que recibió en su calidad de ministro de Defensa, y añadió que la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que preside Yaser Arafat, "viola de forma sistemática los acuerdos que firmó con Israel".
En la actual ola de violencia entre ambas partes, que comenzó a fines de septiembre pasado, han muerto 263 palestinos, 35 israelíes, 13 ciudadanos árabes de Israel, además de un alemán que vivía en la localidad de Bet Yala, cerca de la ciudad cisjordana autónoma de Belén.
Respecto a la frontera con el Líbano, Barak manifestó que aun después de la retirada israelí de ese país, el pasado mes de mayo, el grupo integrista libanés Hezbola (Partido de Dios) "sigue actuando contra Israel, mientras los Gobiernos de Damasco y Beirut cierran los ojos". La alusión al Gobierno de Damasco obedece a que Siria controla de hecho el Líbano y el jefe del Gobierno israelí afirmó que su país "actuará con firmeza para proteger a sus civiles y soldados, y no aceptará de ninguna manera la violación de su soberanía".
Poco después del comienzo -hace algo más de dos meses- del actual levantamiento palestino, la llamada "intifada Al Aksa" o "intifada de liberación", miembros del pro iraní Hezbola disfrazados de tropas de la ONU secuestraron a soldados israelíes en la frontera con Líbano.
