VIENA.— Las autoridades hallaron un gran cúmulo de pornografía infantil junto con fotos de sacerdotes jóvenes realizando actos sexuales en un seminario católico, informó la policía, y muchos austriacos exigieron una investigación criminal y la renuncia del obispo.
Las autoridades de la diócesis de San Poelten, unos 80 kilómetros al oeste de Viena, donde se encuentra el seminario, pasaron buena parte del día en reuniones.
Políticos y autoridades eclesiásticas exigieron la remoción del obispo Kurt Krenn, un prelado conservador, quien provocó furia en Austria al sostener que se trataba de una "travesura infantil" y negarse a renunciar.
Renunciaron el director del seminario, reverendo Ulrich Kuehl, y su segundo, Wolfgang Rothe, dijo la diócesis sin entrar en detalles.
Unas 40.000 fotos y una cantidad no divulgada de películas, incluso de pornografía infantil, aparecieron hace un año en las computadoras del seminario, informó el influyente semanario Profil.
La revista publicó fotos en las que aparecen presuntos sacerdotes jóvenes y sus maestros besándose y acariciándose, y mencionó otras que los mostraban en orgías y juegos sexuales. La pornografía infantil provenía sobre todo de sitios de Internet polacos, dijo la revista.
Hannes Jarolim, vocero del Partido Socialista, opositor, exhortó al Ministerio del Interior a que inicie una investigación criminal. El procurador Walter Nemec dijo que la policía estudiaba el material, que según él incluía fotos de seminaristas "en situaciones perversas con sus superiores".
La Conferencia Episcopal Austriaca se comprometió en un comunicado a realizar una investigación interna exhaustiva e inmediata.
"Todo lo que tenga que ver con la práctica de la homosexualidad o la pornografía no tiene cabida en un seminario para sacerdotes", aseguró.
Krenn dijo a la televisión austriaca que había visto fotos de las autoridades del seminario en situaciones sexuales con los estudiantes, pero describió las imágenes como parte de una broma que "no tenía nada que ver con la homosexualidad".
Su actitud de despreocupación provocó una reacción inmediata en todo el país, el cual el mayoritariamente católico.
"Coleccionar pornografía infantil no puede considerarse una mera travesura", dijo Thomas Huber, del Partido Verde.
A mediados de los 90, el cardenal Hans Hermann Groer —fallecido hace un año— fue acusado de haber abusado sexualmente de estudiantes en una escuela católica para varones 20 años antes. El escándalo lo obligó a renunciar.
Un grupo de funcionarios de la diócesis de San Poelten dijo que pensaba pedir al Vaticano la destitución de Krenn, informó la radio austriaca.
Preguntado si pensaba renunciar, Krenn dijo simplemente, "no".
No hubo declaraciones del Vaticano.