PUERTO MONTT.- El director ejecutivo de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), Carlos Weber Bonte, quedó detenido en una clínica privada de Puerto Montt, luego de declarar ante el Juzgado del Crimen de Los Muermos, una localidad ubicada a unos 50 kilómetros de la capital de la Décima Región, en una causa de supuesta tala ilegal de alerce verde en un fundo de Comercial Sarao.
Antes de arribar al tribunal fue arrestado por personal de la Brigada Medioambiental de la Policía de Investigaciones, que lo puso a disposición de la jueza subrogante, Rosa Muñoz Gibbert, quien ordenó la detención.
Los cargos que investiga la magistrado son cohecho y tráfico de influencias. Busca establecer si son ciertas las acusaciones de que la cabeza máxima de la Conaf habría recibido presiones para otorgar planes de manejo del alerce a privados, es decir, si habría cedido a intereses para permitir que se siga explotando el recurso.
Fueron profesionales de la Agrupación de Ingenieros Forestales por el Bosque Nativo quienes acusaron directamente a Weber de haber reconocido ante ellos que actuaba por presiones.
Si bien correspondía que el personero ingresara a la cárcel Chin Chin, de Puerto Montt, el acusado alegó problemas de salud, por lo cual la magistrado aceptó la reclusión en la clínica privada Los Andes del sector Pichipelluco, con resguardo de cuatro gendarmes.
Los hechos se remontan a febrero pasado cuando la Dirección Provincial Llanquihue de la Conaf presentó ante el Segundo Juzgado de Policía Local de Puerto Montt una denuncia por la supuesta tala ilegal de alerce verde en un fundo de la Comercial Sarao, propiedad del empresario José Comandari, en la comuna de Fresia.
Comandari reaccionó después con una querella contra funcionarios de la Conaf por entrega fraudulenta de guías de libre tránsito par sacar madera de alerce talado ilegalmente.
Weber viajó a la Décima Región para responder por esa acusación, y la jueza subrogante ordenó su detención por el plazo legal de cinco días para definir la situación procesal del ejecutivo.
