Klaus Schmidt-Hebbel trató de "asesina" a María del Pilar Pérez durante el juicio y sostuvo que el crimen de Diego estaba "fríamente calculado".
Christian Zúñiga, El MercurioSANTIAGO.- Un desgarrador testimonio entregó hoy Klaus Schmidt-Hebbel, padre de Diego, durante la cuarta jornada del juicio oral contra María del Pilar Pérez y José Ruz, oportunidad en que trató a la mujer de "asesina".
Klaus -quien se enteró de la muerte de Diego mientras se encontraba en París trabajando en la OCDE- describió el gran trauma que ha significado para su familia su asesinato.
"El asesinato de nuestro hijo es una bomba atómica que esos dos individuos (Pérez y Ruz) soltaron en el seno de nuestra familia. Ellos, en gran medida, destruyeron nuestra familia, dañaron nuestra salud mental", sostuvo Klaus.
Describió que este dolor se manifiesta en síntomas como insomnio y falta de ánimo entre los integrantes de la familia. "Mi mujer se quiebra 20 veces al día y yo tengo dos dolores: La pérdida de mi hijo y el dolor de mi mujer. El dolor de la madre es incomparable", afirmó el padre ante el tribunal.
En tanto, para su hermano, indicó que la ausencia de Diego "es una pérdida brutal", ya que era su consejero y compañero. "Los daños son inconmensurables. Como padre, espero que esos daños con el tiempo vayan haciéndose menos intensos", manifestó el economista.
A esto se suma el daño que el crimen provocó a su carrera, ya que tras el trágico hecho debió abandonar el importante trabajo que tenía en la OCDE, en París, para retornar a Chile a acompañar a su familia. "Mi trabajo y mi carrera fue truncada por este hecho", señaló Klaus, quien indicó que esto implicó "un daño económico muy significativo".
También sostuvo que la vida de Diego era "una enseñanza y su muerte un acto de heroísmo extremo", destacando que era un "hombre bueno, íntegro", que realizó muchos actos bondadosos. "Recibimos el testimonio de un chico que entró con él a la universidad y Diego le financió el almuerzo desde primer año y nunca nos contó".
La trató de "asesina"
Durante la audiencia, Klaus Schmidt-Hebbel trató en más de una oportunidad de "asesina" a María del Pilar Pérez, imputada como la autora intelectual del crimen, y sostuvo que el crimen de Diego estaba "fríamente calculado".
También encaró a la mujer, señalando: "A la señora María del Pilar Pérez, que me está mirando y esbozando una sonrisita en este preciso instante, nunca la conocí antes, pero ciertamente estaba informado de lo peligrosa que era".
Finalmente, expresó durante el juicio que tenía "plena confianza en la justicia chilena y en este tribunal que se va a aplicar justicia a estos dos implicados sentados aquí", aludiendo nuevamente a María del Pilar Pérez y a José Ruz.
Tras la audiencia, la madre de Diego, Greta Niehaus, declinó dar declaraciones, señalando que estaba "muy afectada". También acudieron al juicio numerosos amigos del joven, quienes salieron visiblemente emocionados.