En un duelo válido por la Football League One, tercera categoría del fútbol inglés, sucedió una extraña situación que derivó en un insólito gol.
Jugaba el Barnsley de local ante el Wycombe Wanderers y el partido ya estaba en los descuentos.
En el 90+l', el arquero de la visita Max Stryjek se puso a hacer tiempo ante el asedio de un delantero rival, Sam Cosgrove.
El tema es que Cosgrove le presionó la salida y alcanzó a chocarlo levemente, a lo que Stryjek se dejó caer esperando que le cobraran falta. El balón se le soltó de las manos increíblemente y el atacante no tuvo más que empujarlo.
El golero rápidamente se levantó para reclamar, ganándose amarilla. El árbitro validó la conquista en una jugada que está dando la vuelta al mundo.
Matt Bloomfield, DT del Wycombe, expresó que "esta noche hemos concedido un gol que nunca había visto en mi etapa en el fútbol. Hemos visto muchas veces que los delanteros chocan con los porteros, eso es lo que suele pasar y normalmente se considera una falta".
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