SANTIAGO.- "Presunta adulteración de las cifras de mortandad de peces" y "ocultamiento de los efectos ambientales en el fondo marino bajo su cultivo" son los delitos que se le acusan a la salmonera Nova Austral y por los que el Gobierno presentará tres denuncias en su contra.
Se trata de irregularidades detectadas en una investigación de 14 días que realizó Sernapesca -servicio dependiente del Ministerio de Economía- y que llevaron al mismo ministro de la cartera, Juan Andrés Fontaine, a subrayar que "es una situación lamentable (...) no nos temblará la mano para hacer cumplir la ley".
Como respuesta, la compañía defendió su producción y explicó que "los inusuales niveles de mortalidad presentados en el último ciclo de producción se deben principalmente a la pobre calidad de los smolts (salmón joven) salmones importados desde las regiones IX y X, a los altos índices de mortalidad durante el transporte, y a retrasos de las siembras debido al florecimiento de algas".
Y si bien comunicó que el tema el suelo marino y los efectos ambientales aún es algo que "se está revisando", la firma aseguró estar comprometida "a tomar las acciones que sean necesarias para resolver los problemas identificados y evitar su ocurrencia en el futuro, que en ningún caso tuvieron consecuencias en la calidad del salmón que se produce".
Pero ¿quiénes están detrás de Nova Austral? y ¿cuál ha sido su historia en las aguas del sur de Chile?
Los controladores y el sello "sin antibióticos"
Se trata de una empresa que produce y procesa salmón y es controlada por el fondo de inversión de origen noruego Altor Found III y el fondo estadounidenses Bain Capital. Opera en Chile desde inicios de los 2000 en las frías aguas que rodean el Estrecho de Magallanes y, según su página web, todas sus operaciones se encuentran en la XII Región, la más austral del país. (Ver imagen más abajo)
"Nuestros salmones gozan de temperaturas de aguas bajas y estables durante todo el año, y se benefician de centros de baja densidad para crecer sanos y fuertes", afirman a través de sus medios oficiales y, de hecho, explican que gracias a esas condiciones pueden producir salmones sin el uso de antibióticos desde 2015.
"El impacto de la actividad no es cero, pero tiene que existir un equilibrio y dentro de la capacidad del medio. Se mide el oxígeno y se vigila todo"
Nicos Nicolaides, gerente general de Nova Austral en entrevista con El Mercurio el 10 de abril
Es más, son la única salmonera de Sudamérica en recibir la certificación "Never treated with antibiotics" (nunca tratados con antibióticos) y aseguran que sus ejemplares crecen "naturalmente sin aditivos ni hormonas diseñadas para acelerar su crecimiento".
También, según su página, cuenta con las certificaciones de Aquaculture Stewardship Council (ASC), Best Aquaculture Practices (BAP), y la Global Good Agricultural Practices (Global GAP).
En su equipo de gerencia, destaca el ex gerente general de Salmar y actual presidente del directorio de la compañía, Yngve Myhre. En la gerencia general de la empresa, figura Nicos Nicolaides, ex director de operaciones de AquaChile, Salmones Blumar y Pesquera El Golfo.
Les siguen en cargos el director comercial para América y Asia, Juan Esteban Navarrete; el director de Desarrollo de Negocios en EE.UU., Alex Malaguti; el director comercial de Europa, Per Arne Skjerven; y el director de finanzas, Sergio Montenegro. Todos, con amplia experiencia en la industria salmonera.
Las polémicas recientes
Más allá de la investigación de Sernapesca, la historia de Nova Austral no ha estado exenta de polémicas, sobre todo ante los fuertes cuestionamientos contra la industria salmonera por parte de grupos ambientalistas y científicos.
De hecho, actualmente Greenpeace mantiene abierta una recolección de firmas para que que Nova Austral no continúe con los cuatro proyectos aprobados que tiene para la instalación de 134 jaulas en Puerto Williams.
"Esta empresa no solo causó daños irreparables en Magallanes, sino que obtuvo estos permisos hace más de 15 años, sin evaluaciones ambientales ni participación ciudadana" acusa la organización y llama a frenar la expansión de la empresa mientras "la justicia chilena ordenó frenar estas operaciones mientras se investigan acciones legales presentadas por la comunidad".
La empresa, también está instalada en el paso Picton -en la costa de Isla Navarino-, donde posee tres concesiones de 3,6 hectáreas cada una. Todas, aprobadas por la Subsecretaría de Pesca. Además, abrirá otra cerca del islote Snipe, en medio del Canal Beagle, según consignó El Mercurio en abril de este año.
Sin embargo, la comunidad de la zona ha advertido que las operaciones serían una grave amenaza para la Biósfera Cabo de Hornos, reconocida en 2005 por la Unesco. De hecho, el alcalde de Cabo de Hornos, Patricio Fernández, solicitó hace tres meses al contralor Jorge Bermúdez que revisara la legalidad de la Subsecretaría de Pesca y el SEA al autorizar dichas concesiones.
Por otro lado, una de las últimas situaciones que tuvo a la firma de capitales noruegos en la mira fue una investigación de El Mostrador, la cual reveló una serie de documentos internos de la empresa y correos electrónicos entre los altos ejecutivos donde abiertamente se hablaba de los problemas de mortandad de los peces y de la necesidad de "hacer calzar" las cifras con la legislación vigente que exige Sernapesca.
"En junio la empresa anunció el traslado de las 26 concesiones que tienen en las aguas del Parque Nacional Alberto de Agostini. La relocalización tendrá un costo de US$80 millones para Nova Austral"
Emol
No solo eso, también reflotó una serie de antecedentes recabados por Sernapesca a inicios de 2017, donde se advertía que en nueve centros ubicados en el Canal Beagle -en el Parque Nacional Alberto de Agostini-, habían síntomas de anoxia en el fondo marino, es decir, falta de oxígeno producto de los cultivos.
Frente a la evidencia, la subdirectora de Acuicultura de Sernapesca, Marcela Lara, dijo al citado medio que las prácticas de la empresa "atentan contra la transparencia en el ámbito sanitario y ambiental (...) llevaremos adelante las acciones legales que correspondan para sancionar a los responsables".
Ese mismo día, el 27 de junio, inició la investigación de Sernapesca en contra de la multinacional.
Ubicación de los cultivos de Nova Austral: