Las inmobiliarias están activando medidas para ayudar a los clientes cuya condición económica ha empeorado ante la crisis sanitaria por el coronavius y no pueden materializar una promesa de compra. Eliminación de multas por desistimiento, reintegro del pie -salvo gastos operaciones- y facilidades para mantener la compra en curso son algunas de las acciones que están aplicando las empresas.
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El Mercurio.
