SANTIAGO.-
Agua nieve, lluvia y frío es el pronóstico meteorológico para la zona centro este fin de semana. Fenómenos que, de cumplirse, dejarían a los centros de esquí en buen pie para pensar en la apertura de la temporada invernal. Sin embargo, la pandemia del coronavirus y las restricciones sanitarias mantienen al gremio en la incertidumbre de si efectivamente podrán abrir sus pistas.
En medio del complejo panorama, la Asociación de Centros de Ski (Aceski) elaboró junto a sus 12 socios un protocolo de operación para cuando se levanten las cuarentenas, el cual ya fue revisado junto a la Subsecretaría de Turismo y que ahora se encuentra en manos del Ministerio de Salud.
El documento de 50 páginas detalla una serie de medidas para poder funcionar en tiempos de covid-19, como el distanciamiento social en andariveles, el número de esquiadores en las clases y sanitización de espacios comunes. De hecho, el texto fue incluso solicitado por recintos invernales de Canadá, Argentina y Estados Unidos.
"En el hemisferio norte la pandemia los pilló saliendo del invierno, muchos centros de esquí se vieron afectados en su último mes y medio de temporada y no había tiempo para redactar un protocolo con la robustez y calidad como el que nosotros generamos. Nosotros nos tomamos toda la pretemporada para reflexionar estas medidas", cuenta a Emol el gerente general de Aceski, Francisco Sotomayor.
15 mil empleos genera el rubro a nivel nacional, según Aceski
Y si bien todos los años el inicio de la temporada es una incógnita, porque depende de los factores climáticos, para este invierno la apuesta inicial del gremio es que los centros abran el 1 de julio. "Pero por mucho que haya nieve anunciada, estamos a la espera de qué va a decidir la autoridad sanitaria respecto a nuestro rubro. Al final, todo depende de la evolución de la pandemia", recalca Sotomayor.
El golpe de la pandemia tras la sequía de 2019
El 2019 fue el año más seco desde que se conocen registros de lluvias en Chile. "Fue una mala temporada", dice Ricardo Margulis, gerente general de Valle Nevado, quien además destaca que las expectativas del gremio estaban puestas en la recuperación que podría significar el invierno de 2020.
"La sequía nos dejó ingresos menores a los presupuestados y una caja menor a la esperada y cuando pensábamos que este invierno nos íbamos a desquitar, llega la pandemia y nos pone un signo de interrogación bien grande", lamenta el también presidente de Fedetur.
"Nosotros todos los años tenemos la incertidumbre de la nieve, que además es manejable por la fabricación de nieve con máquinas, pero este año aparte de esa incertidumbre ahora tenemos la de no saber si la gente podrá venir"
Ricardo Margulis, gerente general de Valle Nevado y presidente de Fedetur
En ese sentido, sostiene que dar cifras de la proyección del impacto es muy complejo debido a la incertidumbre en torno al covid-19, pero asegura que "el peor escenario sería que no nos dejen operar o que las cuarentenas se extiendan tanto que no podamos abrir y ese escenario sería terrible".
Por su parte, el director comercial de Andacor -dueños de Colorado y Parques de Farellones-, José Pablo García, hace énfasis en que la situación depende de "cosas que están completamente fuera de nuestro manejo" y que en el caso hipotético de que las cuarentenas se mantuvieran por tres meses más, "lógicamente la temporada de nieve no se va a poder abrir, se va a perder".
De todas formas, destaca que aunque la nieve se derrita existe la posibilidad de potenciar otro tipo de productos que ofrecen los centros: "Es adaptarse o morir", dice y subraya optimista: "Dos temporadas malas te dejan bien malherido, pero los centros de esquí somos súper resilientes".
"Pero más allá de eso, si toca un año malo ¿qué se va a hacer? Obvio que uno esperaría que después de uno malo viniera uno mejor, pero si toca esto no queda otra que seguir. Uno se tiene que ir adaptando y si la temporada hace que puedan subir menos personas, entonces hay que jugar con ese escenario y flexibilizarnos y mejorar los procesos", comenta García.
"Estamos apuntando a tener una temporada que lógicamente va a ser súper diferente, porque para minimizar los riesgos de contagio nosotros disminuiremos los cupos-día en más de un 50% en Colorado y Parques de Farellones"
José Pablo García, director comercial Andacor
Consultado por si la suma de la sequía de 2019 y el golpe del covid-19 podrían poner en riesgo al sector, el gerente general de la Aceski afirma que el negocio invernal es una apuesta a "largo plazo" y que "no por el hecho de haber tenido dos temporadas malas uno va a desistir del negocio, el cual finalmente tiene una vida de 40-50 años y los inversionistas de nuestro rubro lo saben".
De todas formas, Sotomayor afirma que "el peor escenario de todos sería no poder abrir" y que si bien ha sido una posibilidad que se ha conversado con los socios, "ni siquiera dimensionamos cuál sería el impacto de eso".
Ley de Protección del Empleo: 10 de 12 centros se acogieron
El rubro genera 15 mil empleos a nivel nacional, desde Portillo hasta Punta Arenas, según la asociación. Y frente al impacto que ya había significado 2019, en la actualidad al menos 10 de los 12 socios de la Aceski decidieron acogerse a la ley de protección del empleo, que suspende temporalmente a los trabajadores dando la posibilidad de que cobren parte de su sueldo desde el seguro de cesantía.
Según detalló Sotomayor, en Chile hay un total de 19 centros de esquí, de los cuales 12 están asociados del gremio. Estos últimos representan el 95% del mercado: "O sea, del millón de esquiadores que hay en el país, 950 mil esquían en los centros socios", explicó.
Así, explicó que los centros más golpeados por la contingencia son aquellos que ofrecen servicios que van más allá de las pistas de esquí. "Cuando tú tienes centros de esquí como Chillán o Corralco, que tienen hoteles y que tienen una estacionalidad menos marcada, producto de la pandemia y de que los hoteles tuvieron que cerrar, claramente hubo socios que tuvieron que acogerse a la ley".
Margulis de Valle Nevado cuenta que un porcentaje de los trabajadores de planta del recinto fueron acogidos a la ley. Lo mismo expone García de Andacor, quien dice que "efectivamente se han pasado algunas personas que no podían hacer trabajo remoto a suspensión laboral, y los que seguimos trabajando hemos puesto voluntariamente parte de nuestros sueldos para apoyar la baja en los sueldos de esas personas del equipo".
El factor del turismo internacional
Independiente de si las restricciones se levantan y la autoridad sanitaria permite a los centros abrir sus pistas, el presidente de Fedetur enfatiza que "es muy difícil que lleguen los brasileros este invierno a Chile". Turistas que se han destacado por ser los que más visitan la nieve después de los chilenos.
"Quizás somos de los pocos rubros que estamos tan acostumbrados a las variaciones de condiciones y si bien la pandemia es un hecho inédito, el sector de la nieve ha operado bajo condiciones extremas durante toda su historia (...), entonces más allá de la crisis sanitaria, tenemos la suerte de que somos un sector relativamente resiliente"
Francisco Sotomayor, gerente general Aceski
"Probablemente no van a haber turistas extranjeros este invierno. Por el momento no hay luces de cuándo se abrirán las fronteras y lo más probable es que cuando se abran, en un primer momento sea con cuarentenas obligatorias, entonces uno no va de vacaciones a esquiar y además quedarse 15 días haciendo cuarentena encerrado", comenta.
Para poner la importancia de los brasileros en perspectiva, Margulis detalla que dentro de los esquiadores que visitan Valle Nevado en un día, un 75% son chilenos y un 25% extranjeros, de los cuales un 80% son provenientes de Brasil.
"Además nadie sabe cómo va a ser la apertura de fronteras. Yo lo veo muy difícil, estamos a tres semanas de julio y por el momento no se ve que las fronteras de Chile vayan a abrirse".
