Los economistas Stephany Griffith- Jones (Gabriel Boric) y José Luis Daza (José Antonio Kast).
El Mercurio
Una vez más el cuarto retiro de los fondos de pensiones genera diferencias al interior del comando del candidato presidencial de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, considerando que el proyecto -que ha sido criticado por sus asesores- será revisado y votado este viernes por la Cámara, instancia en la que, por cierto, se espera que participe el diputado.
El aspirante a La Moneda ha sido un defensor del cuarto 10%, pese a que la iniciativa salió de la comisión mixta sin impuestos para las rentas más altas, sin el denominado "cerrojo" - que apuntaba a que este fuera el último giro previsional -, y además contempla un adelanto fiscal para las rentas vitalicias. Punto que no cuenta con el apoyo del Gobierno ni del oficialismo, desde donde señalan que se trata de una indicación de iniciativa exclusiva del Ejecutivo.
Ante este escenario, la economista Stephany Griffith- Jones, quien forma parte del consejo asesor de Boric, fue consultada por su postura frente a esta medida en el marco de ChileDay, en Londres.
"Hay un consenso entre los economistas, debo decir, de que un cuarto retiro no es una buena idea, incluyendo a gente del equipo de Gabriel Boric", dijo la directora de mercados financieros en Initiativa for Policy.
"Tal vez sí apoyar el primer y segundo retiro porque el Gobierno manejó mal cuando estalló el covid en 2020, recién en diciembre se empezaron a entregar apoyos a la gente más modesta. Entonces, tenían esa disyuntiva digamos de violar la cuarentena para ir a trabajar, para conseguir plata para alimentar a sus familias, o digamos de quedarse en la casa sin comer", agregó.
Luego, explicó "yo creo que hacer un cuarto retiro es un error, no es una tragedia, pero es un gran error, porque el consumo en Chile está aumentando a una tasa súper alta, la economía está recalentada, vimos un aumento del Imacec del 15%, en fin. Las proyecciones que dio ayer Mario Marcel en su excelente presentación son muy altas para el crecimiento, el déficit fiscal es altísimo, es una cosa que a nosotros nos preocupa mucho. Hay que bajar rápidamente el déficit fiscal y además este cuarto retiro no va a ayudar en nada".
A su juicio, "hay un problema de la clase política (...) y los políticos son los que tienen que decidir, porque ellos están en el Congreso, pero yo personalmente aconsejaría no hacer un cuarto retiro".
"Tenemos el compromiso de Kast"
Desde la otra vereda, el economista José Luis Daza, en representación del equipo del candidato presidencial del Frente Social Cristiano, José Antonio Kast, resaltó: "yo creo que prácticamente todos los economistas de Chile están en contra".
En línea con lo anterior, Daza comentó que "yo tomé contacto con el candidato Kast antes de entrar en el grupo, y el candidato Kast nos aseguró claramente, y esto es una diferencia muy marcada con Boric, los técnicos, los economistas, 'ustedes tienen la última palabra, ustedes son los que dicen qué se hace, qué no se hace, y yo los apoyo'".
Y acotó que "jamás ocurriría una instancia como la que está ocurriendo con Boric en donde, como dijo Stephanie, por razones políticas, en este caso, fuertemente marcada por la influencia del Partido Comunista, el candidato Boric está yendo contra todos sus técnicos, esto no va a pasar (…) tenemos el compromiso del candidato Kast que lo que nosotros decidamos en el programa es la última palabra y eso es lo que va a ser".
En cuanto a su percepción del proyecto como tal, el experto afirmó que "el cuarto retiro no solo es una mala política, es una política que pone en riesgo el financiamiento futuro de los gobiernos de Chile, lo quiero dejar muy claro".
"El mercado de capitales de Chile hoy se ha secado para el financiamiento estatal. Si prosiguen con el cuarto retiro, van a crear circunstancias sumamente difíciles para que el gobierno, sea cual sea, va a tener que continuar en cierta medida, en otros más y en otros menos, apoyándose en el mercado de capitales para financiar el déficit, los programas que necesitamos los próximos años", indicó y subrayó que esto "es extremadamente grave y extraordinariamente frágil, está empujando a Chile a la argentinización de su política financiera".
Además, sostuvo que este tipo de políticas llevará al país a depender del financiamiento del mercado externo y "de los mercados en dólares".
