Una mayor cantidad de productos o más canales de ventas son algunas de las estrategias que, se cree, son el camino del éxito para cualquier emprendimiento, no obstante, enfocarse solo en eso provoca poca fidelidad y la repetición de artículos en el mercado, para eso, se sugiere la implementación de la experiencia digital, lo cual puede mejorar las ventas de un negocio.
Es por ello, que uno de los principales errores es enfocarse en un producto y no en la experiencia que lo rodea. Según el índice de diseño de Mckinsey, las empresas con mejor desempeño en diseño de experiencias, pueden obtener una tasa de crecimiento anual del 21% en el retorno total de ventas.
La jefa de negocios y diseños de Raven, Thalía Bravo, menciona que para obtener buenos resultados, “es necesario un cambio en el mindset o mentalidad cultural de las organizaciones, que hoy en día están centradas en cómo vender un producto del retail o e-commerce, en vez de pensar el cómo mejorar o responder a las necesidades del cliente”.
Para lograr un cambio de mentalidad cultural dentro de una organización que desea transformar su foco, se debe identificar las necesidades que está teniendo su clientela. Por ejemplo, si la empresa tiene problemas de venta con algún producto, es el momento para aproximarse a la venta de experiencias, analizando principalmente las soluciones y, en base a esa investigación plantear una innovación.
La Jefa de Negocios y Diseños de Raven, expone cuatro puntos principales para iniciar un cambio de mentalidad cultural y trasladar el foco hacia la experiencia en tu negocio.
En primer lugar, Bravo sugiere entender e investigar al usuario. “Es fundamental conocer las necesidades de tus clientes, realizar estudios de mercados o encuestas de mejora continuamente”
Luego, propone prototipar, es decir, identificar y crear una solución de manera ágil que se pueda testear con los clientes con un costo bajo, de esta manera es posible probar una innovación.
En esa línea, la ejecutiva menciona que es importante la iteración. “Las soluciones deben estar en constante mejora sobre la base de investigaciones actualizadas, de manera que los comentarios de los clientes sean ajustados rápidamente”, apuntó.
Por último, Bravo menciona que se deben asumir riesgos e invertir, ya que estos tipos de cambios conllevan responsabilidades económicas empresariales. “No basta con tener la intención de innovar, si no que es necesario atreverse a hacerlo y asumir los peligros asociados a eso”, expresó.
