Un bosque al estilo japonés en un terminal de buses. Esa es la llamativa recomendación que hizo la Seremi de Medio Ambiente de la Región Metropolitana, Sonia Reyes Packe, al proyecto que el Fondo de Infraestructura S.A. pretende construir en la comuna de San Bernardo, y que actualmente está en evaluación ambiental.
La autoridad pidió incorporar áreas verdes con especies nativas de bajo consumo hídrico y, en ese sentido, aplicar la técnica de Miyawaki.
La propuesta se enmarca en el análisis del proyecto "Modificación de Proyecto Terminal de Buses del Sistema de Transporte Público de la Región Metropolitana El Retiro", una iniciativa que contempla una inversión de US$6 millones para operar 184 buses, de los cuales 137 serán eléctricos.
Si bien se trata de una infraestructura orientada a la movilidad urbana, la seremi planteó que también debe incorporar soluciones ecológicas.
En su informe, la autoridad ambiental recomendó evitar grandes extensiones de césped, fomentar "núcleos arbóreos a escala de barrio" y promover la biodiversidad mediante la instalación de "posaderas, comederos y casas anidadoras para aves".
La solicitud de utilizar la técnica japonesa apunta a que el terminal contribuya a la restauración ecológica del entorno, más allá de mitigar impactos negativos.
Esta técnica ya ha sido utilizada por dos municipios, se trata de dos proyectos de un total de 30.000 metros cuadrados en las comunas de Cerrillos y Pudahuel.
Asimismo, el Gobierno Metropolitano, que en enero y en medio de altas temperaturas en la capital, presentó un plan para "enfriar" Santiago. La idea es utilizar el método japonés para que crezcan bosques.
Con todo, la exigencia de la seremi de Medio Ambiente para el proyecto en San Bernardo no pasó desapercibido para el ex ministro de Hacienda, Ignacio Briones, quien comentó esto a través de su cuenta de X y lo reprochó duramente.
"Seremi Medio Ambiente RM de regreso: Primero fue corredor biológico y refugio invertebrados hospital del cáncer en Santiago. Ahora, en terminal de Transantiago, pide refugio para aves, árboles nativos y recomienda técnica japonesa".
"Película de terror y discrecionalidad fuera de la ley", sostuvo, dejando entrever que a su juicio, las solicitudes escapan al marco legal de la evaluación ambiental.
¿Qué es la técnica Miyawaki?
La técnica Miyawaki es un método japonés de reforestación acelerada desarrollado por el botánico Akira Miyawaki (1928-2021), que permite crear bosques densos, biodiversos y resilientes en espacios reducidos y en un corto periodo de tiempo.
La clave del método radica en plantar exclusivamente especies nativas, a razón de tres a cinco por metro cuadrado, en una disposición que simula la estructura de un bosque maduro con diferentes estratos de vegetación: arbustos, árboles medianos y árboles altos.
Según los estudios del propio Miyawaki, los bosques creados con esta técnica pueden crecer hasta 10 veces más rápido que los bosques tradicionales y capturar 30 veces más carbono. Además, requieren cuidados solo durante los primeros tres años, tras los cuales se vuelven autosuficientes.
En su artículo de 2004 titulado "Restauración del entorno vital basada en la ecología de la vegetación: teoría y práctica", Miyawaki enfatiza la necesidad de entender la vegetación natural de una región antes de iniciar un proceso de reforestación, y destaca los beneficios ecológicos y sociales de estos microbosques, entre ellos la recuperación de biodiversidad, la mitigación de las islas de calor y la mejora de la calidad del aire.
El método ha sido aplicado con en más de 3.000 proyectos alrededor del mundo, incluyendo ciudades como París, Bogotá o Chennai, donde se han instalado microbosques Miyawaki en patios escolares, bandejones viales y espacios públicos urbanos.
El proyecto
En la ficha del proyecto ingresada al SEIA, se señala que el nuevo terminal "contempla la construcción de un terminal clasificado como Depósito de Vehículos (DV), diseñado para el resguardo de los buses urbanos una vez finalizados sus recorridos", y se argumenta que esta infraestructura busca "optimizar el sistema de movilidad, reconociendo la importancia de los desplazamientos y rutas actuales como parte integral del sistema de transporte".
El texto destaca que la iniciativa pretende impactar positivamente en la calidad de vida de los ciudadanos "mediante una infraestructura sostenible que fortalezca la equidad territorial y el funcionamiento del transporte remunerado de pasajeros", y que contempla tecnologías limpias para avanzar en la "descarbonización de la matriz energética", junto con una disminución de las emisiones contaminantes y del ruido urbano.
"En total, el proyecto contempla una flota de 184 buses, de los cuales 137 serán eléctricos y 47 de combustión interna. Esta iniciativa busca consolidar un modelo de transporte público moderno, más responsable con el medio ambiente y alineado con los estándares de desarrollo sostenible", detalla la declaración.
Asimismo, el proyecto apunta a "la consolidación de ejes de transporte urbano con puntos de interconexión vial", así como a "mejorar la conectividad, el acceso a servicios y equipamientos urbanos", y "la calidad de la infraestructura en la que el personal del Sistema desempeña sus labores".
En ese contexto, las observaciones de la Seremi de Medio Ambiente apuntan a fortalecer el componente ecológico de la iniciativa a través de soluciones basadas en la naturaleza.