Corona aún no puede concluir con su proceso de quiebra, lo que podría traerle más problemas con sus trabajadores. Es que hoy la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento (Superir) emitió un oficio en el que pidió aclarar información, por inconsistencias en la documentación recibida.
"Si bien coinciden los dos mayores acreedores, sus montos no son iguales en ambas fuentes de información. Asimismo, el tercer mayor acreedor varía, ya que la Tesorería General de la República no figura en la Nómina de Créditos Reconocidos. Además, se constataron diferencias en los montos de las acreencias informadas en ambos documentos respecto de los demás acreedores", dice el documento de la Superir.
"Resulta necesario que se aclare la información tanto respecto de los tres mayores acreedores como de los montos de todas las acreencias, toda vez que la inconsistencia detectada podría afectar el derecho a voto en el procedimiento de nominación de liquidador titular y suplente", agrega.
El abogado Matías Berríos Fuchslocher, socio del estudio jurídico Berríos & Palavecino I Pinochet, y quien ha estado representando a los trabajadores en el proceso señala que "los contratos de trabajo se encuentran plenamente vigentes" y que "con el retraso de la liquidación concursal se genera el no otorgamiento del trabajo efectivo, del trabajo convenido, entre la empresa y los trabajadores".
Con ello en cuenta, sostiene, "se tienen que pagar los sueldos hasta el último día. ¿Cuál será el último día? El día anterior a la declaración de la liquidación concursal".
"Esto retrasa la liquidación concursal. Retrasa que se declare en quiebra multitiendias Corona", detalla, sobre el documento de la Superir.
El superintendente de Insolvencia y Reemprendimiento Hugo Sánchez, por su parte, indicó que "con el fin de evitar eventuales nulidades del proceso de nominación, cumplió con informar al Tribunal que detectó inconsistencias en la información contenida en la Nómina de Créditos Reconocidos del procedimiento, incluyendo las ampliaciones o modificaciones presentadas posteriormente, y el Certificado de Deudas acompañado por la Empresa Deudora, lo cual podría afectar el derecho a voto de los acreedores"
Cabe destacar que las tiendas de Corona bajaron las cortinas de forma definitiva el 3 de junio. La firma cruzaba una difícil crisis financiera, que intentó enfrentar con una reorganización. No obstante, y si bien el plan fue aprobado por sus acreedores, finalmente no consiguió los $22 mil millones que requería para la reestructuración.
Tras ello, más de 80 demandas se presentaron en contra del grupo económico vinculado a Corona.