La industria chilena quedó inconforme con la ratificación de aranceles a las importaciones de 10% hacia EE.UU. Es que ayer el mandatario de ese país, Donald Trump, firmó el decreto para la aplicación de las tasas, que comienzan el 7 de agosto.
Desde la academia, en todo caso, ponen paños fríos. Y señalan que el impacto debiera ser acotado. Esto, considerando que se trata de un alza en los precios para las firmas norteamericanas que importan y que hay otros países con aranceles más altos.
"Mala noticia"
Antonio Walker, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultrua (SNA), señaló que "no estamos conformes con el arancel del 10% ya que es fundamental cumplir los TLC y asegurar las mismas reglas del juego para el comercio internacional".
"Los productos americanos ingresan a Chile sin aranceles -recordó-, y esa debe ser también la condición para nuestras exportaciones".
"Las medidas unilaterales del gobierno de Estados Unidos generan gran incertidumbre en los mercados internacionales. Por ello, consideramos importante continuar negociando hasta alcanzar arancel cero para los productos agrícolas chilenos".
En la construcción tampoco ven con buenos ojos las tasas. "Cualquier incremento respecto a las condiciones que teníamos por los tratados de libre comercio vigentes es una mala noticia y tendrá consecuencias, sobre todo en nuestro país, que está muy abierto al comercio externo", indicó Alfredo Echavarría, presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).
"Es todavía prematuro para tener una evaluación definitiva de la magnitud de los efectos, pero sin duda habrá afectaciones", aseguró también. Y dijo esperar que el Gobierno "pueda continuar con las negociaciones para tratar que esta situación no se transforme en una situación definitiva y permanente".
Arturo Clément, presidente de SalmonChile, pone las fichas en la tarea que está llevando adelante el Ejecutivo. "Esperamos que hayan finalizado de la mejor manera las conversaciones entre el grupo negociador y el gobierno de EE.UU. que finalizaron ayer en Washintong", sostuvo.
"Yo creo que este va a ser un gran paso hacia adelante en avanzar a reducir los aranceles que hoy día están en un 10% y tratar de llevarlo a arancel cero", añadió.
Desde Corma, asociación gremial chilena que reúne a más de 160 actores del sector forestal, Rodrigo O´Ryan indicó que "la prioridad es trabajar estrechamente con los clientes norteamericanos, demostrando que Chile es un proveedor confiable y de clase mundial. Nuestros productos de madera cultivada y procesada cumplen con altos estándares de calidad, sustentabilidad, legalidad y seguridad, posicionando al país como un socio estratégico en quien Estados Unidos puede confiar para sustentar su propio desarrollo".
El presidente de la entidad aseguró también que "al mismo tiempo, es fundamental avanzar con decisión en la diversificación de mercados. Esto no implica restar relevancia a Estados Unidos, que seguirá siendo un destino prioritario, sino actuar con visión empresarial y resiliente, ampliando el portafolio de clientes para abrir nuevas oportunidades y reducir riesgos".
"Continuaremos trabajando"
Rodrigo Yáñez, secretario general de la Sofofa, señaló que "la mantención del arancel base general del 10% no representa una buena noticia, pero sí entrega cierta certeza regulatoria y arancelaria. Se suma a la muy positiva exención del arancel del 50% para nuestras exportaciones de cátodos de cobre".
Agregó que "continuaremos trabajando para que las exportaciones chilenas sean competitivas en el mercado estadounidense, restableciendo el escenario previo al 2 de abril".
Desde la CPC, en tanto, Susana Jiménez indicó que "Chile es un buen socio comercial, que se caracteriza por la seriedad y trazabilidad de sus productos de exportación. Es muy importante mantener una buena vinculación y negociación con Estados Unidos, para tratar de volver a la situación original que era de libre comercio, sin aranceles para nuestros productos que vendemos a este gran socio comercial".
"La próxima semana -complementó- los equipos negociadores de ambos países continuarán dialogando y desde los gremios empresariales seguiremos prestando toda nuestra colaboración. Para responder a los desafíos del escenario internacional, es clave mantener la mejor coordinación público privada".
"Impacto acotado"
Gonzalo Escobar, profesor Facultad Economía y Negocios de la Unab, sostuvo que "la confirmación del arancel del 10% va a tener un efecto bastante acotado. Es una tasa baja, a pesar de la importancia relativa que tiene Estados Unidos en los destinos de los productos chilenos, y por eso era la preocupación principalmente respecto del cobre".
"Como el cobre queda fuera, el efecto va a estar muy reducido. Por lo tanto, el impacto en la industria nacional es menor", indicó asimismo.
En la misma línea, Carlos Smith, docente investigador del Centro de Investigación de Empresa y Sociedad de la Universidad del Desarrollo apuntó a un "efecto menor".
"Es un aumento en el costo de algunos productos a nuestros compradores en EE.UU. y esos podrían perfectamente absorberlos en términos de márgen o con leves aumentos en el precio (...) Otros países tienen aranceles bastante más altos" indicó.
"Eventualmente -agregó- podría tener algunos efectos positivos en términos de desviaciones de comercio".