Una disputa con acusaciones cruzadas es la que protagonizan los abogados de las dos partes que se enfrentan en el denominado caso Australis, en el que la semana pasada se ordenó al empresario Isidoro Quiroga a pagar casi US$300 millones a la empresa china Joyvio.
El caso se remonta a 2019. Ese año Joyvio compró la salmonera chilena Australis Seafoods a Quiroga por unos US$921 millones. Según diría luego Joyvio, Quiroga no les informó que la empresa estaba produciendo mucho más salmón del autorizado, lo que aumentaba artificialmente su valor. Esto, además, les traería millonarias multas ambientales.
Por eso, Joyvio acusó al empresario de haber implementado un plan de sobreproducción ilegal para operar la compañía y luego venderla a un precio inflado. Y recurrió al tribunal arbitral del Centro de Arbitraje y Mediación (CAM) de la Cámara de Comercio de Santiago, solicitando la anulación del contrato de compraventa y la restitución total del monto pagado.
El fallo descartó la existencia de dolo (intención de engañar), aunque reprochó a los vendedores por entregar información "incompleta" durante el proceso. Es decir, determinó que los vendedores sí declararon y garantizaron de forma incompleta la situación de la compañía, omitiendo información relevante.
Por esto, ordenó la restitución de US$217 millones más intereses desde 2019 millones, lo que puede ser apelado.
Aunque Joyvio solicitó anular el contrato de compraventa, el tribunal rechazó esa petición. En cambio, aplicó un ajuste en el precio basado en la sobrevaloración ocurrida.
En paralelo, continúa una arista penal. La Fiscalía formaliza a Isidoro Quiroga y exejecutivos por estafa y administración desleal. Ello mantiene al empresario con las medidas cautelares de arraigo nacional y firma mensual.
Cabe destacar que antes de 2021, la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) no sancionaba la sobreproducción per se si se cumplían los límites de siembra; solo después de 2021 la sobreproducción se consideró una infracción grave, lo que influyó en la previsibilidad de las contingencias.
"Mediocridad y declive moral"
Ante este caso, Cristóbal Eyzaguirre, el abogado de Quiroga y socio de Claro & Cia, decidió dar su primera entrevista a un medio de comunicación en sus 35 años como profesional. En conversación con El Mercurio, lanzó duras acusaciones contra sus colegas representantes de Australis en la disputa, al arbitraje y también a la Fiscalía.
"Ese caso será estudiado en todas las escuelas de Derecho como el caso símbolo de la mediocridad y declive moral que hoy aqueja a nuestra profesión", vaticinó.
"Ese caso será estudiado en todas las escuelas de Derecho como el caso símbolo de la mediocridad y declive moral que hoy aqueja a nuestra profesión"
Cristóbal Eyzaguirre, abogado de Quiroga
Es que para el profesional "se analizará el comportamiento de los abogados en este caso, y si se ajusta a la ética mínima el salir dando entrevistas en los diarios, aniquilando a toda una familia, a pesar de que se sabía desde el primer día que los delitos que se les imputaban eran falsos. Se estudiará la liviandad y arbitrariedad como se investigan algunos de estos delitos por la fiscalía".
"Y se criticará duramente a árbitros que sabiendo que deben fallar conforme a derecho deciden, a sabiendas, fallar algo que no estuvo dentro de lo pedido por los demandantes y en abierta vulneración al contrato por el que se les designa, el que juraron respetar fielmente al asumir su encargo", sostuvo también.
Para el abogado defensor, el fallo arbitral confirma "que no se ocultó esta información al comprado" y que "no existe engaño ni dolo alguno". Precisa además que "la compradora conoció lo que hoy se denomina la sobreproducción de Australis".
"En lo sustantivo -dijo además- la sentencia es lapidaria contra los querellantes. Da por probado todo lo que hemos afirmado desde el primer día en sede arbitral y penal. Y demuestra que todas estas acusaciones estruendosas por la prensa de delitos varios, no eran más que un ejercicio de presión de un grupo de connotados abogados que se comportaron de manera prepotente y muy alejados de lo que exige la dignidad de su profesión".
"Que se disculpen"
Eyzaguirre señaló a El Mercurio esperar que sus colegas "Oddo, Bofill, Eguiguren y Zaliasnik, que tanto daño hicieron por la prensa a toda una familia, hoy tengan la decencia profesional de reconocer su error y se disculpen, por los mismos medios de prensa que tanto usaron para conducir su brutal campaña de desprestigio".
Consultado por el medio acerca de por qué deberían disculparse, considerando que el arbitraje de todos modos condenó a los vendedores a pagar casi US$300 millones, el abogado indicó que "se comprobó que todos los hechos imputados son falsos, lo cual les constaba desde el primer día".
"La necesidad de que se disculpen cae de cajón al revisar algunas de las decenas de entrevistas que han dado. Veamos un solo ejemplo. Basta que revisemos lo que dijeron Joyvio y sus abogados en la entrevista a este mismo diario, el 26 de marzo de 2023, cuando recién comenzó el caso, y contrastar esas acusaciones brutales con la realidad, hechos que la sentencia arbitral da por acreditados", precisó.
A Eyzaguirre se le preguntó además por qué se sostiene que el árbitro falló algo que "no estuvo dentro de lo pedido".
"El fallo arbitral -explicó- ordena pagar un 15% de la cuantía del juicio a los vendedores (aproximadamente, US$ 215 millones más intereses). Pero entendamos cuál es la infracción que los árbitros del voto de mayoría dicen que cometieron los vendedores".
"Luego de decir que no se ocultó información, que no hubo dolo, y que el criterio de la autoridad para controlar la producción de salmones cambió dos años después de la venta de Australis, sostienen los árbitros que algunos ejecutivos tenían, al tiempo en que se hizo la venta a Joyvio, sospechas de que el criterio de la autoridad respecto a la sobreproducción podía cambiar", detalló.
"Sospechas de que este criterio podría cambiar en el futuro. Para luego concluir que los vendedores habrían omitido o sido imprecisos en revelar esta sospecha a los compradores. Esa es la única infracción al contrato de venta que señalan los árbitros. Ninguna otra", precisó.
"Si el fallo establece que por no haberse revelado esas sospechas de cambio regulatorio, se habría infringido la representación sobre temas ambientales y de ahí concluye el incumplimiento. Si es insólito que sancione por no revelar sospechas de eventuales cambios regulatorios futuros. Y también es insólito que el voto de mayoría no respetó ninguno de los acuerdos de las partes", criticó también.
Efectivamente, el argumento principal del fallo del Tribunal Arbitral para ordenar la restitución se basa en que la parte demandada omitió o entregó información incompleta en sus declaraciones y garantías contractuales, señalando textualmente que los vendedores "fundadamente sospechaban que, finalmente, al cosechar iban a exceder el PT y la RCA, con el evidente riesgo de que la autoridad aplicaría sanciones por sobreproducción en el futuro", lo que no informaron expresamente a los compradores.
Eso es precisamente lo que Eyzaguirre critica con fuerza, opinión aparentemente compartida por el árbitro disidente Ramón Cifuentes, quien si bien se alineó con sus pares en el rechazo de la demanda principal, discrepó del fallo en cuanto a la condena de restitución, asegurando que la información entregada por los vendedores a los compradores se ajustaba a las prácticas de fiscalización existentes en ese entonces.
Además, indicó que el propio contrato excluye la responsabilidad por pérdidas resultantes de cambios en las prácticas o políticas de cualquier autoridad gubernamental posteriores a la fecha del contrato. Para él, el cambio de criterio fiscalizador de la SMA ocurrido a partir de 2021 entra dentro de esta exclusión contractual, y por lo tanto, no debería generar responsabilidad para los vendedores.
"No puede haber estafa"
Eyzaguirre se refirió además a la formalización por parte de la fiscalía. "No puede haber estafa si no se ocultó nada a los compradores, como afirma el fallo arbitral. Y menos administración desleal si ellos siempre conocieron la realidad de la empresa, como también afirma el fallo", indicó.
Aseguró también esperar que se cierre el proceso. "Hace mucho tiempo que un fiscal objetivo habría terminado la causa penal. Veamos un solo ejemplo", dijo.
"Soberbia y condescendencia"
Los abogados Jorge Boffil, Alberto Eguiguren, Sebastián Oddo y Gabriel Zaliasnik contestaron -a través de una carta al director en El Mercurio- a las acusaciones que lanzó Eyzaguirre.
"Los niveles de soberbia y condescendencia exhibidas por el abogado Cristóbal Eyzaguirre en una entrevista publicada por 'El Mercurio' ayer son inéditos", sostuvieron.
"Nuestro colega -agregaron- considera que jueces árbitros, el Ministerio Público, fiscales y jueces del crimen no se han comportado correctamente en el denominado caso 'Australis', y que todos serían representantes de la 'mediocridad y declive moral que hoy aqueja nuestra profesión'".
"Nuestro colega -agregaron- considera que jueces árbitros, el Ministerio Público, fiscales y jueces del crimen no se han comportado correctamente en el denominado caso 'Australis', y que todos serían representantes de la 'mediocridad y declive moral que hoy aqueja nuestra profesión'"
Jorge Boffil, Alberto Eguiguren, Sebastián Oddo y Gabriel Zaliasnik
"Lamentamos que una derrota profesional, por muy importante que sea, lleve al abogado Eyzaguirre a extralimitarse en sus declaraciones. Más aún cuando su cliente Isidoro Quiroga fue condenado a pagar la histórica cifra de US$300 millones por un tribunal arbitral de alto prestigio profesional y luego de que el Ministerio Público haya decidido formalizarlo por los delitos de estafa y administración desleal", señalaron asimismo.
Continuaron señalando que "en el notable libro 'La conjura de los Necios', a propósito del protagonista Ignatius Reilly, el epígrafe —citando a Jonathan Swift— señala: 'Cuando en el mundo aparece un verdadero genio, puede identificársele por este signo: todos los necios se conjuran contra él'".
"Seguiremos adelante con todas las acciones civiles y penales que correspondan para reivindicar a nuestro cliente, acatando siempre las decisiones de los tribunales y respetando las instituciones", concluyeron.