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La crisis económica que heredará el próximo presidente de Bolivia y el factor Chile en el debate

Rodrigo Paz Pereira, quien venció ayer con el 32% de los votos, ha llamado a una "relación comercial diferente" con nuestro país.

18 de Agosto de 2025 | 14:33 | Por Pablo San Martín, Emol
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Rodrigo Paz y Jorge "Tuto" Quiroga

EFE
Una nueva era se puede abrir en la relación económica entre Chile y Bolivia.

Es que la elección del domingo dejó con muy buenas opciones al candidato de la Democracia Cristiana, Rodrigo Paz Pereira, quien ha manifestado la necesidad de una "relación comercial diferente" con Chile.

En segunda vuelta se enfrentará con Jorge "Tuto" Quiroga, expresidente del vecino país y contrario a las políticas que ha llevado adelante el MAS, que ha gobernado las últimas dos décadas.

Quiroga, no obstante, ha sido más crítico con Chile, sobre todo en los asuntos relativos a La Haya.


Pero la posibilidad de un giro en las relaciones, independiente de quien salga, se ve con fuertes probabilidades. Esto, considerando la difícil situación económica que atraviesa Bolivia.

El difícil panorama económico en Bolivia


El termómetro económico en Bolivia marca crisis, y esa será una de las principales herencias que recibirá el próximo mandatario . Es que el vecino país registra una inflación interanual en julio que se ubica en 24,9%.

Solo el primer trimestre el alza de los precios acumulada alcanzó el 15,53%.

La inflación ha provocado una reducción del poder adquisitivo del salario real en torno a un 5% en solo tres meses, uno de los impactos más altos en más de tres décadas según han destacado distintos expertos.

La pobreza también es preocupante. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), la tasa era de 36% en 2023. Si bien esta entidad no ha actualizado los números, hay otras instituciones que han hecho el esfuerzo de hacer la medicación.

En mayo de 2025, la Fundación Jubileo modificó las cifras tomando en cuenta la inflación acumulada. Concluyó que la pobreza moderada podría llegar al 44% y que la pobreza extrema se estimaría en 17,5%.

La crisis se arrastra desde al menos hace algunos años. En 2021, el PIB de Bolivia creció un 6,11% y en los años posteriores continuó creciendo. Pero en 2024 alcanzó apenas un 0,73%. El gobierno atribuye dicha caída a los conflictos sociales que han protagonizado los seguidores del expresidente Evo Morales, quien se distanció de la actual administración.

Como si fuera poco, desde 2023 el vecino país enfrenta una prolongada escasez de divisas, la cual coincidió con la caída de las reservas internacionales netas a US$3.148 millones, muy por debajo del máximo histórico de US$$15.122 millones alcanzado en 2014.

Para el cierre del primer semestre de 2025, estas reservas descendieron aún más, situándose en US$2.807 millones, de acuerdo con datos del Banco Central de Bolivia.

En paralelo, durante el último año se hicieron habituales las largas filas de automóviles en las estaciones de servicio, reflejo de los problemas de abastecimiento de combustibles, lo que ha generado un amplio descontento social.

Es en este contexto, precisamente, en el que los candidatos evalúan distintas medidas para enfrentar el panorama económico. ¿Está Chile siendo considerando?

Las miradas de Paz


Paz, quien fue el inesperado ganador de las elecciones de ayer, ha hablado abiertamente de la posibilidad de abrir las relaciones diplomáticas y económicas con Chile.

"Evo (Morales) perdió el mar en La Haya. (Luis) Arce perdió el río Silala en La Haya. Ya no podemos pedir nada", dijo durante su campaña. En la instancia llamó a "luchar por una relación comercial diferente" con Chile, con el objetivo de mejorar la situación económica de Bolivia.

"Si queremos un prepuerto, un puerto seco, tenemos que hacer una nueva relación con Chile", indicó el democratacristiano, quien alcanzó el 32% de las preferencias en los sufragios.

"Hagamos una apertura de relaciones diplomáticas, comerciales, para que El Alto sea la más beneficiada. En función del comercio sobre el Pacífico, con su puerto seco en el departamento", añadió.

Según recogió El Mercurio, antes había también tocado el asunto de las relaciones con Chile. Específicamente, en conversación con radio Erbol, dijo que que era necesario "cambiar la lógica" con Chile y que conocía bien el país por haber viajado "tres veces por todo el territorio chileno" y por conocer "casi todas las entradas legales e ilegales en la frontera".

En 2023 Paz ya defendía cambiar las relaciones con Chile. Ese año hablaba de "abrir relaciones diplomáticas" con nuestro país y "recuperar la relacion comercial".

"La gente quiere platita, comercio, no comen de ideología o derrotas en La Haya. Comen de negocios, comen de generar riqueza, comen de vender productos, comprarlos o producirlos", indicó.

Las posiciones de Quiroga


Jorge Quiroga estuvo activamente en contra de la posición de Chile en el litigio ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, en el que Bolivia demandó a Chile para que se obligara a negociar una salida soberana al océano Pacífico.

Desde el inicio de la demanda en 2013, Quiroga respaldó la estrategia de llevar el tema marítimo a la CIJ.

Fundamentalmente, consideraba que los compromisos asumidos por Chile en distintos momentos históricos demostraban que Santiago sí había estado dispuesto a negociar, lo cual debía ser reconocido por el tribunal.

En sus declaraciones públicas insistió en que el caso no trataba de "revivir la Guerra del Pacífico", sino de exigirle a Chile que cumpla su palabra de abrir un diálogo real sobre acceso soberano al mar.

Quiroga criticó que Chile negara la competencia de la CIJ y que cuestionara los organismos multilaterales. En 2015 dijo que nuestro país estaba "aislándose diplomáticamente" al desconocer a la Corte, a la ONU y al propio Papa Francisco como posibles mediadores.

Durante los alegatos orales en marzo de 2018, emplazó a Chile a aclarar si acataría el fallo de la CIJ y si respetaría las resoluciones de la OEA.

Cuando la CIJ finalmente falló a favor de Chile (octubre de 2018), señalando que no existe obligación jurídica de negociar, Quiroga admitió la derrota, pero mantuvo una postura crítica.

La relación de Chile y Bolivia


En las últimas dos décadas, las relaciones entre Chile y Bolivia han estado marcadas principalmente por la tensión diplomática, con la demanda marítima como telón de fondo. El punto más álgido del conflicto se dio entre 2013 y 2018, cuando Bolivia llevó el caso a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para obligar a Chile a negociar un acceso soberano al Pacífico.

El tribunal falló en contra de La Paz, lo que supuso un duro revés para la diplomacia boliviana y consolidó la posición chilena de que los tratados firmados a comienzos del siglo XX cerraron definitivamente esa discusión.

En paralelo, los vínculos económicos se han mantenido por necesidad más que por voluntad política. Bolivia depende de los puertos chilenos de Arica e Iquique para gran parte de su comercio exterior, amparada en el Tratado de 1904 que garantiza libre tránsito.

En los últimos años han surgido nuevos factores que han tensionado o forzado mínimos niveles de cooperación. La crisis migratoria en el norte chileno y la disputa por las aguas del Silala, resuelta en 2022 nuevamente a favor de Chile, pusieron la agenda bilateral bajo presión.

Cabe destacar que Paz y Quiroga comparten varias propuestas, como la eliminación de los subsidios a los combustibles y reducciones de impuestos, y anuncian una ruptura con el sistema de corte estatal que impuso el MAS bajo la guía de Morales.
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