Uno de los desafíos que enfrentará el próximo gobierno es el que algunos especialistas han denominado como "emergencia laboral". Es que ad portas de nuevas cifras de empleo -que el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) dará a conocer el viernes- los candidatos a La Moneda se han esmerado en mostrar sus propuestas.
Los últimos números oficiales no son positivos: hay un 8,9% de desocupación a nivel nacional en el trimestre abril-junio y en el caso de las mujeres la cifra asciende a 9,9%.
Además, en una año solo se crearon 141 puestos de trabajo.
Se trata de un tema que se ha tomado la agenda económica en el último tiempo y es un flanco especialmente complejo para la candidata oficialista Jeannette Jara, dado que mientras ella ejercía como ministra del Trabajo el deterioro en las cifras laborales se agudizó.
Es en este contexto en el que han surgido planteamientos para revertir la situación, que van desde un crédito tributario hasta un sueldo mínimo transitorio. También se habla de profundos cambios al Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Cense).
Las propuestas de Kast
El candidato del Partido Republicano, José Antonio Kast, ha mencionado a lo largo de la campaña una serie de medidas que se implementaría durante su eventual gobierno.
Una de ellas consiste en un crédito tributario por contratación, vinculado al pago de remuneraciones con cotizaciones. Con esto se busca motivar la contratación formal y de calidad.
En otras palabras, la medida consiste en permitir rebajas en la carga impositiva en proporción a los empleos creados con cotizaciones al día.
Otra de las propuestas de Kast es la indemnización a todo evento, pero con un sistema de "cuentas individuales de ahorro". Este sería un sistema alternativo y voluntario, donde trabajador y empleador pactan una indemnización que se acumula en una cuenta personal del trabajador.
La idea es que incluso quienes renuncien puedan llevarse lo acumulado. Con todo, desde distintos sectores han criticado la propuesta, considerando que los recursos provendrían desde el trabajador.
Kast, asimismo, tiene en mente introducir cambios importantes en el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence). O así lo dejó ver esta semana, al menos, durante su participación en un seminario de Icare.
"Lo cambiaría entero, el Sence es como del año 75, 76. Y me sorprende que esto no haya sido materia de ocupación de los distintos ministerios del Trabajo. Y más todavía cuando uno conoce muchas experiencias de trabajadores que se capacitan y se frustran", indicó.
"¿Dónde está la inteligencia artifical? ¿Dónde está la modernidad aplicada a esto?", se preguntó.
Entre las propuestas de Kast se encuentran además avanzar en flexibilidad laboral y una reforma a la Dirección del Trabajo (DT).
Matthei y la flexibilización
Evelyn Matthei se fijó una meta ambiciosa: crear un millón de nuevos empleos durante su gobierno, distribuidos por región.
Para esto, la candidata de Chile Vamos, Demócratas y Amarillos apunta a reformular los actuales subsidios laborales, avanzando "hacia instrumentos que incentiven activamente la formalización y la contratación en sectores prioritarios, incluyendo mujeres, jóvenes y adultos mayores".
Asimismo, la exministra del Trabajo propone un subsidio monetario de $200 mil por seis meses para las mujeres que logren conseguir un empleo formal y una fuerte flexibilización.
Sobre esto último, se señala que se avanzará hacia "jornadas calculadas de forma anualizada, turnos compartidos, retiro progresivo y jornadas que se adapten a las necesidades del trabajador, respetando siempre sus derechos fundamentales".
"Esto permitirá a las empresas adaptarse a sus ciclos productivos y entregar oportunidades especialmente a mujeres, jóvenes y adultos mayores", indica su programa.
En la misma línea, la candidata buscará que se habilite la contratación por horas, con las exigencias de seguridad social que existen hoy.
Sobre el Sence también hay propuestas. Matthei quiere "alinear la oferta de capacitación con las demandas de los sectores productivos".
La candidata, además, propone, una reforma para una sala cuna universal, con provisión mixta.
Las propuestas de Jara
La candidata del oficialismo, Jeannette Jara, propone para la generación de empleo el fomento de las mipymes y las cooperativas.
Asimismo, el programa señala que se implementará "un programa de transformación productiva para aquellas empresas y trabajadores afectados por la llegada de la inteligencia artificial, para su adecuada incorporación y absorción del cambio".
También, alude a la unificación y racionalización de la red de capacitación, certificación e intermediación laboral (Bolsa Nacional de Empleo y Sence, entre otros). Esto, con el objetivo de implementar una Política Nacional de Empleo descentralizada.
En materia de sala cuna Jara también ofrece propuestas. En concreto, buscará eliminar a restricción del artículo 203 del Código del Trabajo que limita el derecho a sala cuna solo a empresas con 20 o más trabajadoras, ampliando el acceso universal al beneficio.
El documento de la candidata menciona, además, que se priorizará la aprobación de un proyecto de ley que cree un Subsidio Unificado al Empleo para hacer más eficiente la política estatal de empleo, unificando subsidios existentes.
La opinión de los expertos
Jorge Rodríguez, académico Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de los Andes, señala que "los subsidios a la contratación pueden tener efectos positivos en el empleo y, además, son programas fiscalmente manejables".
Destaca que en "Estados Unidos hay evidencia de que incluso generan más recaudación que el costo de financiarlos".
Recalca, en todo caso, que "no son una solución definitiva: sus impactos se concentran en ciertos sectores y dependen mucho del diseño. En Chile, por ejemplo, hemos visto—en un estudio que estamos desarrollando—que uno de estos bonos no tuvo efectos sobre el empleo".
En cuanto al Sence, dice que "los retornos a la capacitación financiada por franquicia tributaria son acotados. Por otro lado, no es claro que Sence deba necesariamente financiar cualquier tipo de capacitación: con retornos positivos, hay incentivos para que trabajadores y empleadores asuman directamente esa inversión".
Mauricio Apablaza, docente investigador de la Facultad de Gobierno UDD, por su parte, explica que "aumentar la flexibilidad puede impulsar la productividad al permitir a las empresas adaptarse mejor a las fluctuaciones de la demanda. Por otro lado, la flexibilidad laboral puede beneficiar a los trabajadores al ofrecerles más control sobre sus horarios y facilitar la conciliación entre la vida personal y laboral".
"La reforma a los subsidios a los empleos debe modificarse y debe modificarse rápidamente, porque hoy día los subsidios relacionados a la contratación; el subsidio al empleo joven y el bono trabajo a la mujer tiene montos muy bajos, muy pequeños. Y por lo tanto no es un incentivo real a las empresas", dice por su parte, Ricardo Ruiz de Viñaspre, exdirector de Sence.
