Los romances nacen en cualquier parte, incluso en los pasillos de una empresa. Sin embargo, el mundo corporativo -cada vez más- ha ido regulando los códigos de conducta, por lo que esos vínculos pueden transformarse en verdaderas bombas de tiempo.
En los últimos años, en varias de las compañías más reconocidas del planeta se han protagonizado líos amorosos que terminaron con la renuncia o destitución de sus máximos ejecutivos. Sin ir más lejos, la gigante suiza Nestlé, la empresa de alimentos más grande del mundo, anunció ayer el despido de su CEO, Laurent Freixe.
¿La razón?
"Una relación sentimental no revelada con una subordinada directa", señaló la compañía en un comunicado. Esto, en todo caso, es lejos de ser un caso aislado entre gigante multinacionales.
Si bien los romances laborales son parte de la realidad cotidiana en las oficinas, cuando involucran a altos ejecutivos, el impacto -dicen las firmas-trasciende lo privado y afecta directamente a la reputación, la cultura y el gobierno corporativo de las empresas.
El escándalo viral de Andy Byron en Astronomer
Uno de los casos que más atención ha acaparado este año es el del -ahora ex- CEO de la tecnológica Astronomer, Andy Byron, quien fue visto abrazando en un concierto de Coldplay a una trabajadora de la empresa que no era su esposa.
El momento fue captado por la popular "kiss-cam" y se viralizó rápidamente en redes sociales. El propio Chris Martin, vocalista de la banda, comentó en pleno show: "Uy mira a esos dos: O están teniendo una aventura o son muy tímidos".
La reacción pública fue inmediata y la firma emitió un comunicado: "Astronomer está comprometido con los valores y la cultura que nos han guiado desde nuestra fundación. Se espera que nuestros líderes marquen la pauta tanto en conducta como en responsabilidad, y recientemente, esa pauta no se cumplió".
Aunque Byron fue suspendido en un inicio, luego presentó su renuncia "y la Junta Directiva la aceptó", señaló la compañía.
Kohl’s y la caída de Ashley Buchanan
El 30 de abril de 2025, Kohl’s, una gran empresa del retail en Estados Unidos, anunció la destitución inmediata de su CEO, Ashley Buchanan, tras una investigación legal externa que reveló un conflicto de interés derivado de una relación personal no informada.
Según documentos presentados ante el regulador estadounidense, Buchanan habría favorecido con millonarios contratos de consultoría a una firma en la que trabajaba una persona con quien mantenía una relación sentimental, bajo "términos altamente inusuales y favorables para el proveedor".
Aunque el caso no estuvo vinculado a los resultados financieros de la empresa, sí constituyó una grave violación a su código de ética.
Buchanan, con más de 20 años de trayectoria en gigantes del retail como Walmart, Sam's Club y Michaels, terminó su carrera en Kohl's envuelto en un escándalo.
Bernard Looney y la petrolera BP
En 2023, fue el turno del consejero delegado de BP, Bernard Looney. El ejecutivo presentó su dimisión tras reconocer que no fue "completamente transparente" sobre "relaciones personales" con colegas.
El directorio explicó que en 2022 recibió denuncias anónimas sobre su conducta, lo que motivó una investigación en la que Looney reveló "un reducido número de relaciones pasadas".
Aunque en esa instancia no se determinó violación del código de conducta, nuevas acusaciones obligaron a revisar el caso y forzaron su salida.
El propio Looney admitió en su declaración que "no fue completamente transparente en sus revelaciones anteriores".
Edward Tilly y el caso Cboe Global Markets
Ese mismo 2023, otro nombre resonó en el mundo financiero: Edward Tilly, entonces CEO de Cboe Global Markets. Tras una investigación iniciada por la junta directiva, se determinó que había mantenido relaciones personales no reveladas con colegas, lo que "violó las políticas de Cboe y contrasta marcadamente con los valores de la compañía".
En un comunicado, la empresa recalcó que "Cboe se esfuerza por mantener los más altos estándares éticos en toda la organización e investiga exhaustivamente y toma las medidas apropiadas cuando determina que se ha violado alguna de sus políticas".
La renuncia de Tilly fue inmediata.
El recordado despido de Steve Easterbrook en McDonald’s
Uno de los ejemplos más comentados ocurrió en 2019, cuando la cadena de comida rápida McDonald’s anunció la salida de su CEO, Steve Easterbrook, por mantener una relación consensuada con una empleada.
Aunque no se reveló la identidad de la trabajadora, la compañía fue categórica en que el vínculo infringía sus políticas internas. Easterbrook asumió la responsabilidad: "Teniendo en cuenta los valores de la empresa, estoy de acuerdo con la junta que es hora de que siga adelante", escribió en un correo al personal.
Intel y el antecedente de Brian Krzanich
Un año antes, en 2018, Intel ya había enfrentado un caso similar. Su CEO, Brian Krzanich, presentó su renuncia tras confirmarse que había mantenido una "relación consensuada" con una empleada.
La investigación interna y externa determinó que se había violado la política de no fraternización de la empresa, aplicable a todos los gerentes.
"Una investigación realizada por consejeros internos y externos confirmó que se incurrió en un violación de la política de política de no fraternización de Intel, que se aplica a todos los gerentes", detalló el comunicado de la firma.
