María Magdalena UndurragaPrimavera ViveroPrimavera Vivero quiere transformar balcones, terrazas y jardines en pequeños huertos urbanos. Fundado en 2019 por
Magdalena Undurraga psicóloga y emprendedora relató que este proyecto nació con un objetivo claro: acercar el cultivo de hortalizas, hierbas y flores a todos, sin importar el espacio disponible.
"Nuestras plantas están pensadas tanto para quienes están comenzando como para quienes ya tienen experiencia", explicó Undurraga, quien hoy ofrece más de 200 variedades para cultivar en casa y abastece también a pequeños viveros y agricultores.
La idea surgió mientras trabajaba en un proyecto familiar de plantines para agricultores del norte de Santiago. A través de redes sociales, Magdalena detectó una demanda creciente por productos en formatos más pequeños y con despacho a domicilio, especialmente orientados a personas interesadas en cultivar sus propios alimentos.
Así, con capital propio y un modelo autogestionado, La Primavera Vivero comenzó a dar sus primeros pasos en el mercado.
Su modelo de negocios combina ventas online, participación en ferias y mercados, talleres de huerto y cultivo de almácigos, y clientes mayoristas.
Tres decisiones clave marcaron el crecimiento de la empresa: mostrar el proyecto con honestidad en redes sociales, involucrarse en todo el proceso productivo y formalizarse desde el inicio.
Entre sus metas está mejorar la logística para llegar a más regiones y consolidar la producción para agricultores de la zona norte de Santiago.
En una nueva edición de Lo pensó/ lo hizo de Emol, la historia de La Primavera Vivero invita a descubrir cómo la pasión por la tierra puede transformarse en un emprendimiento.
¿Qué es Primavera Vivero y qué necesidad cubre?
La Primavera Vivero es un proyecto dedicado a la producción de almácigos agroecológicos de hortalizas, hierbas y flores. Nacimos con el propósito de acercar el cultivo de hortalizas a todas las personas, sin importar el espacio que tengan. Nuestras plantas están pensadas tanto para quienes están comenzando como para quienes ya tienen experiencia, ofreciendo más de 200 variedades a cultivar. Abastecemos tanto a particulares como a pequeños viveros y agricultores. Realizamos despachos semanales en la Región Metropolitana y, recientemente, también a regiones.
¿Cuándo, cómo y dónde surgió la idea?
El año 2019, mientras trabajaba en un proyecto familiar enfocado en la producción de plantines para agricultores del norte de Santiago, noté a través de redes sociales que existía una gran demanda por este tipo de productos en formatos más pequeños. Así comencé a experimentar con la venta al detalle y el despacho a domicilio, enfocándome en personas interesadas en cultivar sus propios alimentos en casa. Así nació La Primavera Vivero.
¿Quién puso el capital inicial y quién te financia hoy?
Ha sido un proyecto completamente autogestionado desde sus inicios. Partí con capital propio y he ido reinvirtiendo las utilidades generadas por el negocio.
Tu modelo de negocios:
Nuestro modelo combina distintos canales: el principal es la venta a través de nuestra página web, donde los clientes pueden hacer sus pedidos y recibirlos en casa. Participamos también en ferias y mercados, y realizamos talleres de huerto y cultivo de almácigos. Además, trabajamos con clientes mayoristas como viveros y pequeños agricultores.
Tu público objetivo:
Apuntamos a personas que buscan producir sus alimentos en casa, a quienes buscan una vida más sustentable, conectada con la naturaleza, sin importar si viven en un departamento o en una casa con jardín. También trabajamos con viveros y agricultores de pequeña y mediana escala que buscan almácigos de calidad.
¿Quién/quiénes son tu competencia?
Prefiero pensar en la colaboración más que en la competencia. Cada proyecto tiene su sello propio y creo que mientras más auténticos seamos y más fieles a nuestros valores, todos tenemos algo que aportar.
Tres pasos claves que diste:
Mostrar el proyecto con honestidad: compartir en redes sociales el trabajo real detrás del vivero fue clave para conectar con nuestra comunidad.
Involucrarme en todo el proceso productivo: entender a fondo cada etapa me ha permitido mejorar y buscar eficiencia.
Formalizarme desde el principio: asumir responsabilidades como empresa desde el comienzo me permitió proyectar sostenibilidad y crecimiento real.
Tu misión (lo que tienes que aprender)
Sigo aprendiendo cómo escalar sin perder el sello artesanal ni la conexión directa con los clientes. También quiero aprender más sobre logística y distribución para llegar a más rincones de Chile sin afectar la calidad del servicio ni del producto.
Tu propósito (lo que quieres lograr):
Que cada vez más personas cultiven su alimento y se reconecten con los ciclos de la naturaleza. Queremos educar sobre alimentación estacional y promover el cultivo como una herramienta de salud mental, conexión y bienestar.
¿Cuáles son los mayores riesgos que enfrenta Primavera Vivero?
Los factores climáticos son siempre un desafío. Heladas, olas de calor o lluvias fuera de temporada pueden afectar gravemente la producción.
¿Qué mercado apuntas conquistar?
Nuestro foco actual está en expandirnos a regiones y mejorar nuestra capacidad logística para llegar a más lugares de forma eficiente. También estamos ampliando nuestra capacidad productiva para abastecer a mas agricultores de la zona norte de Santiago.
¿A quién admiras?
Admiro profundamente a mi papá, de quien heredé el amor por el campo y la tierra. También admiro a todos quienes se atreven a emprender ya que no es fácil, y hay mucha valentía y determinación detrás de cada historia.
Cómo te ves en cinco años:
Me gustaría consolidar la producción de plantines para los agricultores de esta zona, con instalaciones que me permitan automatizar y hacer cada vez mas eficiente el uso de recursos. En cuanto a los huertos domiciliarios, me gustaría vincular de manera más fuerte y clara las bondades físicas y psicológicas que genera tener un huerto y producir tus propios alimentos. También sueño con tener un punto de venta físico que sea un lugar de encuentro y educación.
Empresa chilena preferida
Admiro mucho el trabajo que hace Carmen Garrido con su marca de conservas “La Cooka”, agricultora agroecológica que trabaja al ritmo de las estaciones, con productos deliciosos y un gran respeto por la naturaleza. Además, ella ha sido mi gran referente a la hora de cultivar tomates, mi cultivo favorito y el único que ofrecemos al mercado como producto final.
Chile, ¿es un buen país para invertir?
Si bien Chile sigue siendo un país atractivo para invertir, especialmente si lo comparamos con otros países de la región, aún enfrentamos barreras importantes. El acceso a financiamiento para pequeños negocios sigue siendo limitado y los procesos para postular a fondos públicos o formalizar emprendimientos son excesivamente burocráticos.
Además, la creciente crisis de seguridad también se ha hecho sentir, incluso en zonas rurales. Esto no solo afecta la logística y la producción, sino que también genera un clima de incertidumbre que muchas veces desincentiva la inversión.
¿El Estado es un buen facilitador o un obstáculo para tu negocio?
Aunque hay herramientas y fondos disponibles, muchas veces el exceso de burocracia y los tiempos de espera hacen que acceder a esas ayudas sea muy difícil. Es necesario simplificar los procesos para que realmente se transformen en un apoyo concreto.
Tus máximas son:
- Hacer las cosas con amor y paciencia, como se trabaja la tierra.
- Nunca dejar de aprender.
- La comunidad es el corazón del proyecto.
Reseña de fundadores
Magdalena Undurraga, 32 años, psicóloga. Fundadora de La Primavera Vivero, emprendedora agroecológica y promotora del bienestar emocional a través del cultivo de la tierra.
