El presidente de los EE.UU., Donald Trump, inició en los últimos días una nueva ofensiva en la guerra comercial, que está inquietando a las bolsas y generando reacciones desde China.
En su estilo, con amenazas que luego se matizan, el mandatario norteamericano anunció hace unos días un aumento "masivo" de tasas a los productos chinos, tras lo cual comunicó que impondría un arancel adicional de 100% a partir del uno de noviembre, así como controles a las exportaciones de software crítico.
El nuevo arancel, dijo Trump, sería "por encima de cualquier arancel que estén pagando actualmente".
Es que al mandatario no le gustó el hecho de que el país gobernado por Xi JinPing haya instaurado restricciones sobre la exportación de tierras raras (elementos clave para la tecnología, defensa, etc).
China también detuvo compras de soja estadounidenses como represalia comercial indirecta.
En los días recientes ha habido ciertos mensajes que buscan "enfriar" las tensiones. Trump suavizó su tono hacia China en redes sociales, lo que fue interpretado como un intento de moderar el pánico en los mercados.
Trump dijo, de hecho, que busca "ayudar a China, no perjudicarla".
Morgan Stanley advirtió que si las tensiones no se suavizan pronto, el índice S&P 500 podría sufrir una corrección de hasta 11%, aunque la bolsa vivió una recuperación esta mañana.
En concreto, hoy hubo un rebote: el S&P 500 subió cerca del 1,1 %, el Dow Jones aumentó unos 413 puntos (0,9 %) y el Nasdaq unos 1,3%.
En Europa los índices también registraron avances, alimentados por una combinación de compras de oportunidad y expectativas de que el conflicto no escale más allá de lo necesario.
Pero los expertos han sido enfáticos: el conflicto no tiene tranquilos a los mercados.
En China, en tanto, el CSI300 cayó alrededor de 1,8%, y el Shanghai Composite un 1,3%.
El petróleo, en tanto, se desplomó más de 4%, reflejando preocupaciones sobre la demanda global en un escenario de desaceleración o escalada comercial.
Cabe destacar que las exportaciones chinas hacia EE. UU. en septiembre cayeron un 27 % interanual, reflejando un fortalecimiento de las barreras comerciales.
No obstante, el comercio global de China (exportaciones totales) creció 8,3 % en ese mes, lo que sugiere que China está buscando mercados alternativos fuera de EE. UU.
En medio de este panorama, EE.UU. comenzará mañana además con un arancel que afecta directamente a Chile: el de la madera.
En nuestro país, los representantes del sector han sido enfáticos al señalar que el impacto en las Pymes será profundo.