El dólar abrió a la baja este martes en el mercado cambiario local y se ubicó en los $905, su menor nivel en más de un año, principalmente por el sólido repunte del cobre -que se mantiene en máximos históricos- y por la debilidad global del dólar.
En concreto, el billete verde a las 09:00 horas anotó un descenso de $5,59 y se cotizaba en $905,10 vendedor y $905,04 comprador, su menor precio desde el 1 de octubre de 2024.
El cobre, por su parte, rompió un nuevo récord este martes, al superar por primera vez los US$12 mil por tonelada, equivalente a US$5,45 por libra, en la Bolsa de Metales de Londres. En el mercado Comex (Estados Unidos) el metal rojo también sube, 1,02% hasta los US$5,56 la libra.
En el plano internacional, Diego Montalbetti, analista de mercados de Capitaria, explicó que la jornada está "marcada por la debilidad persistente del dólar a nivel global y por un mayor apetito por activos de cobertura. El mercado reacciona a un nuevo máximo histórico del oro, impulsado por factores acumulados que vienen consolidándose desde hace semanas".
Añadió que "el mercado opera con cautela, privilegiando ajustes técnicos y reposicionamiento de carteras, en un contexto donde la narrativa dominante sigue siendo una Fed más flexible hacia adelante, menor demanda por dólares como refugio y mayor flujo hacia commodities y activos reales".
En esa línea, Felipe Sepúlveda, analista jefe de Admirals Latinoamérica, sostuvo que el movimiento del tipo de cambio se da "en línea con un cobre que extiende su rally y un contexto externo claramente adverso para la divisa estadounidense. La presión bajista se explica principalmente por el fuerte desempeño del metal rojo y la caída del dólar a nivel global".
Respecto del desempeño del cobre, Sepúlveda destacó el "sólido sesgo alcista" del cobre, añadiendo que "si bien analistas señalan que la demanda fuera de vehículos eléctricos, inteligencia artificial y energías renovables sigue siendo relativamente débil, el mercado continúa dominado por restricciones de oferta. El metal se encamina a su mayor alza anual desde 2009, con un avance cercano al 36,7% en lo que va del año".
El analista agregó que las tensiones de oferta responden a "interrupciones en grandes minas de Chile y Perú, retrasos en Indonesia que reducirían la producción entre 8% y 12%, y una limitada incorporación de nuevos proyectos. A esto se suma el acuerdo de fundiciones chinas para fijar cargos de tratamiento y refinación en cero para 2026, el nivel más bajo registrado".
En cuanto al dólar a nivel global, Sepúlveda indicó que "el Dollar Index cae 0,39% hasta 97,5, su nivel más bajo desde inicios de octubre, ante expectativas crecientes de nuevos recortes de tasas por parte de la Reserva Federal. El mercado descuenta dos recortes de 25 pb en 2026, reforzados por llamados del presidente Trump a reducir costos de financiamiento".
Añadió que "la debilidad del dólar se acentúa con el repunte de metales preciosos por demanda de refugio ante tensiones entre EE.UU. y Venezuela, y con la fortaleza del yen tras el alza de tasas del Banco de Japón a máximos de tres décadas".
Con este escenario, el analista proyectó que "con el cobre firme y un dólar global debilitado, el tipo de cambio en Chile podría moverse en un rango de $895 a $910 en el corto plazo, con un sesgo bajista mientras se mantengan estos catalizadores externos".
Desde el plano local, Ignacio Mieres, head of research de XTB Latam, señaló que "el peso chileno se mantiene estable, en un contexto donde los indicadores internos no han generado mayor volatilidad. La moneda encuentra apoyo en los máximos históricos del cobre, lo que favorece los fundamentos y las cuentas del país, por lo que se espera que el tipo de cambio tienda a estabilizarse durante la sesión".
