El ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, abordó esta tarde el funeral del supuesto líder narco asesinado la jornada de ayer en la Villa Pucará de la comuna de Quilicura y afirmó que las exequias representan un "extremo riesgo" para el entorno, por lo que se habrá reforzamiento de los servicios policiales.
En un punto de prensa, la autoridad sostuvo que "de acuerdo a la evaluación operativa que se ha hecho ahora con Carabineros, el funeral califica de extremo riesgo", por lo que la comuna contará "va a tener servicios reforzados, tanto de radiopatrulla, orden público y Gope" hasta la culminación de la actividad.
La alcaldesa de Quilicura,
Paulina Bobadilla (IND.- Frente Amplio) señaló que "hemos pedido incansablemente la intervención de la inteligencia policial en puntos críticos de la comuna. Y hoy quiero pedir enfáticamente el acompañamiento de militares también, porque sabemos que la dotación de Carabineros es poca en nuestra comuna".
Al respecto, Cordero sostuvo que "de acuerdo a la legislación chilena, para situaciones de orden público sin títulos habilitantes, no se pueden utilizar los militares. Por lo tanto, o declara estado de excepción o aprobamos las normas de infraestructura crítica".
El secretario de Estado declinó a referirse a las líneas investigativas del caso.