
DOETINCHEM, Holanda.- Dejando a un lado su goleada de 7-0 sobre Honduras, Chile perdió sus otros tres partidos del Mundial Juvenil de fútbol con 11 goles en contra y ninguno a favor.
Aún así, el técnico José Sulantay atribuyó esa disparidad a la calidad de los rivales y no a fallas mortales de su equipo, y dijo estar satisfecho con el desempeño de la "Roja" juvenil luego de perder por 3-0 ante Holanda en octavos de final.
"Hemos jugado con las mejores selecciones, hemos jugado con España, campeón de Europa y vicecampeona mundial, con Marruecos, que está en cuartos, y con Holanda en Holanda", expresó Sulantay.
"Creo que demostramos que somos un equipo que encaramos los partidos siempre de frente", agregó.
Sulantay reconoció, sin embargo, que al fútbol chileno le falta madurar "para llegar a los niveles que uno quisiera", y dijo que llegar al Mundial y clasificarse a la segunda ronda ya fue un logro.
El técnico lamentó el gol que Holanda le encajó a los tres minutos, cuando Ryan Babel aprovechó que dos chilenos discutían con el árbitro y tomó un servicio de un balón muerto, encontró el camino abierto, y fusiló al portero Carlos Espinoza con un balazo cruzado.
Sulantay dijo que la primera anotación sacudió a su equipo, pero no lo quebró. La segunda, un gol de Quincy Owusu-Abayie los 73 minutos, los sepultó.
"El gol tempranero es el gol que no se esperaba, nos complicó el panorama", apuntó Sulantay. "Hasta que vino el segundo gol, eso nos hizo abrirnos más, ir con más gente al frente, y ahí llegó el tercero", agregó.
El técnico cuestionó la jugada del gol de Babel, alegando que el árbitro Rodolfo Sibrián estaba hablando con los jugadores chilenos cuando Holanda sirvió y anotó. "Nos pillaron mal parados", subrayó.