LIMA.- El Gobierno peruano decidió hoy bajar un tributo que se aplica al pisco, tradicional aguardiente de uva cuya denominación de origen está en disputa entre Perú y Chile, para impulsar su producción y venta en el país y en el extranjero.
El presidente de Perú, Alejandro Toledo, promulgó un decreto supremo mediante el cual se fijó reducir el Impuesto Selectivo al Consumo hasta 1,5 soles (0,4 dólares) por litro producido.
Con esa medida, según el gobernante, se busca pasar de las 3.500 hectáreas de uva sembradas actualmente en el Perú a las 45.000 que históricamente se cultivaban para la elaboración de pisco y de vino.
Toledo refirió que espera que "sigan aumentando las ventas" del aguardiente de uva en el mercado peruano y en el exterior.
Perú mantiene un litigio con Chile por el uso de la denominación de origen del licor llamado pisco, debido a que en 1932 los chilenos registraron el nombre como la bebida nacional de ese país.
Tambien rebautizaron como pisco a Puerto Unión, donde nació la destacada poetisa Gabriela Mistral.
Los peruanos aseguran que tienen las pruebas necesarias para ganar el litigio con los chilenos y aducen, entre otras cosas, que pisco significa "avecita" en quechua y que existe un río, un valle, un pueblo y un puerto llamados así desde tiempos prehispánicos.
A inicios del 2003, el gobierno de Toledo decidió difundir el consumo del pisco en el mercado interno e incrementar la exportación del "producto bandera del Perú y patrimonio cultural de la nación", como rezan sus títulos oficiales.
Parte de la campaña del Ejecutivo peruano consiste en posicionar el cóctel llamado "pisco sour", que es una combinación de pisco puro, limón y azúcar, al que se le puede añadir como complementos clara de huevo, jarabe de goma y amargo de angostura.
