NUEVA DELHI.- El Primer Ministro de China, Li Keqiang, se mostró este martes favorable a abrir más el mercado chino a productos indios y reducir el desequilibrio comercial entre los dos gigantes asiáticos, lo que suele traer problemas con Nueva Delhi.
Esta voluntad de apertura comercial, que sería, según los dos países, un "nuevo motor" de crecimiento para la economía mundial, demuestra los esfuerzos comunes para poner fin a las recientes tensiones en la frontera.
"China desea que entren cada vez más productos indios al mercado chino", dijo Li en un discurso ante empresarios en la capital federal india, Nueva Delhi, respondiendo a la preocupación de las autoridades indias sobre el déficit comercial.
Además, aseguró estar "seguro de que tenemos la capacidad para reducir el desequilibrio comercial entre nuestros dos países".
China es el mayor socio comercial de India y sus intercambios comerciales se elevaron a 66.500 millones de dólares el año pasado, según el ministro adjunto chino de Comercio, Jiang Yaoping. Los dos países quieren llegar a los 100 mil millones de dólares para 2015.
Pero la balanza comercial favorece a China, ya que India tiene un déficit con su vecino de 29 mil millones de dólares en 2012, según datos chinos.
Según Li, Pekín comprende perfectamente la importancia de unos intercambios comerciales equilibrados para mantener buenas relaciones entre los dos países más poblados del planeta.
"China nunca ha tenido intención de desarrollar un superávit comercial. Solo los intercambios comerciales dinámicos permiten relaciones comerciales duraderas", aseguró.
No es la primera vez que los dirigentes chinos se comprometen a reducir el déficit comercial, aunque sin resultados.
El año pasado, India había invitado a las empresas chinas a invertir en nuevas zonas industriales.
India y China mantienen relaciones diplomáticas a menudo tensas debido a los diferendos territoriales que han sido objeto de 14 rondas negociadoras desde 1962, fecha en la que los dos países libraron una guerra corta pero brutal.
La presunta incursión el 15 de abril de tropas chinas en una zona reivindicada por India en el Himalaya recrudeció las tensiones pero Li Keqiang y el primer ministro indio, Manmohan Singh, se comprometieron el lunes a poner de lado su diferendo para construir "confianza mutua".
La presencia en India del Dalai-lama, el jefe espiritual de los tibetanos, también contribuye a los roces entre los dos países.