ALMERÍA, España.- La energía "solar térmica", desarrollada por el proyecto "Solair" en la región española de Almería (Andalucía), podría suplir la demanda anual mundial de electricidad si se instalara "tan sólo" en el 1 por ciento de las zonas áridas y semi-áridas del planeta.
Así lo anunció hoy el director del proyecto, Manuel Romero, del Centro de Investigaciones Energética, Medioambientales y Tecnológicas españolas (CIEMAT), en una jornada en la que se presentaron las "Nuevas Energías" en las que trabaja la Comisión Europea.
Romero explicó que este "novedoso" tipo de energía se denomina "Solair" porque utiliza dos fuentes renovable el sol y el aire.
Este proyecto utiliza componentes revolucionarios: piezas de cerámica que captan el calor procedente de los heliostatos (espejos solares) y aire caliente, que posteriormente se deposita en una turbina en donde se genera la electricidad.
En el consorcio de "Solair" participan España, Alemania, Dinamarca y Grecia, señaló Romero, para quien esta tecnología, desarrollada hace unos meses, "ya está lista" para ofrecer en el mercado.
"Lo ideal -explicó- sería instalarla en territorios desérticos inhóspitos" como en las regiones del norte de África, porque tienen un gran número de horas de insolación.
Romero anunció que países como Argelia o Egipto ya se han interesado por instalar estas plantas y exportar energía eléctrica a Europa.
El coste de esta tecnología aún es elevado (en torno a los 18-22 céntimos de dólar por kilowat/hora), ya que aún está por desarrollar, aunque, según este experto, "en unos años", cuando se construyan varias plantas, los costes podrían ser más competitivos.
En concreto, detalló, los costes son tres veces más elevados que el del kilowat/hora en el mercado en este momento, sin embargo, es tres veces más barato que el coste del kilowat/hora obtenido con los paneles solares convencionales (fotovoltaica).
Una de las grandes ventajas de esta tecnología es la capacidad de almacenamiento del calor de los paneles cerámicos, ya que permite que el calor residual pueda ser utilizado para generar electricidad hasta nueve horas después de la puesta del sol.
El proyecto ’Solair’ prevé la creación de tres plantas en Europa con fines comerciales, y se intentará, según Romero, que dos de ellas estén en España.
Además de esta tecnología, también se presentó el proyecto "Wave Dragon", que pretende generar electricidad a través de la energía obtenida de las olas y "Hot Dry Rock", que utiliza el calor del interior de la corteza terrestre para calentar agua.