BOSTON.— El candidato presidencial demócrata John Kerry prometió hoy que luchará por los estadounidenses en el país y, de ser necesario, en el exterior, al tratar de convencer a los votantes de que podrá reemplazar al Presidente George W. Bush como comandante en jefe.
"La fuerza es algo más que palabras duras", afirma Kerry en el discurso que preparó para la Convención Nacional Demócrata y que pronunciará ante 4.350 delegados.
"Necesitamos que nos miren como un ejemplo a seguir, no sólo que nos teman", dijo el senador por Massachusetts en pasajes de su discurso obtenidos de antemano. "El futuro no pertenece al miedo; pertenece a la libertad".
Embarcado en una campaña en la cual marcha cabeza a cabeza con Bush, el candidato opositor demócrata enfrentaba varias necesidades imperiosas en uno de los discursos más importantes de la campaña presidencial. Entre ellas se destacaba la de convencer a los votantes independientes e indecisos que es una alternativa al presidente republicano capaz de brindar seguridad.
En su discurso, previsto para durar unos 50 minutos, Kerry se dirigió también al ala conservadora de los demócratas, alejados del partido en los últimos años porque creen que éste ha renegado de sus valores.
"Durante cuatro años hemos escuchado hablar mucho sobre los valores. Pero los valores sin acciones no son sino consignas", dijo, e intentó extender la definición de los valores políticos, desde asuntos sociales como el aborto y el control de las armas en manos privadas, que favorecen a los republicanos en las zonas rurales y suburbanas, hasta la igualdad económica, la reforma de la salud pública y otras banderas demócratas.
"Los valores no son sólo palabras. Son patrones de vida. Tienen que ver con las causas que abrazamos y la gente por la cual luchamos", dijo Kerry. "Y es hora de que aquellos que hablan de los valores familiares empiecen a valorar a las familias".