SANTIAGO.- Como un gran misionero y servidor de Dios calificó esta tarde el arzobispo de Santiago, Francisco Javier Errázuriz, al fallecido cardenal Juan Francisco Fresno, en la homilía de la misa solemne que se desarrolló en su honor hasta las 17:30 horas en la Catedral de Santiago.
"Hoy es unánime el sentir de que fue un paso decisivo en la reconstrucción de una convivencia nacional profundamente herida", enfatizó monseñor Errázuriz, quien además lo recordó como un actor fundamental del proceso de reconciliación nacional.
Con la presencia del Presidente de la República, Ricardo Lagos, además de otras autoridades del país, se dio inicio a las 16:00 horas a la ceremonia para despedir los restos del religioso, fallecido el jueves pasado a la edad de 90 años.
El acto, encabezado por Errázuriz, se desarrolló en la Catedral de Santiago, hasta donde llegaron además cientos de sacerdotes, laicos, familiares, amigos del fallecido prelado, y representantes de otros credos religiosos.
Uno de los primeros actos simbólicos fue cuando Errázuriz purificó con incienso el féretro del fallecido prelado, que tiene en su superficie el báculo y la mitra que Fresno usaba, y una biblia.
En la homilía Errázuriz destacó la labor que tuvo Fresno durante la visita a Chile del Papa Juan Pablo II, y su sintonía con diversos proyectos de Dios. Al respecto, recordó la preocupación que el ex prelado sentía por los niños, los estudiantes de escasos recursos, y los enfermos terminales de Sida, entre otros.
Junto con enumerar sus obras, incluso aquellas que efectuó luego de dejar de ser cardenal, Errázuriz agradeció a Dios por las bendiciones que entregó sobre Fresno.
"En esta hora solemne queremos agradecer a Dios, nuestro Padre, por las horas en que él se acercó a su hijo Juan Francisco, bendiciéndolo, y haciendo brillar su rostro y su favor sobre él, y de corazón darle las gracias por haber abierto el oído y el corazón de tantos para acoger su mensaje", sostuvo el arzobispo.
El cuerpo de Fresno permaneció en el principal templo católico del país desde el mediodía de ayer. Antes fue velado por sus familiares en la en la capilla de la Sagrada Familia, en la Dehesa.
Desde la tarde de ayer y durante la mañana de hoy, decenas de fieles se acercaron hasta el principal templo católico nacional para rendirle sus respetos y agradecimientos.
Emotivo homenaje
Luego de la misa, en el atrio de la Catedral, tuvo lugar un homenaje público al Cardenal, ocasión en la que hicieron uso de la palabra el presbítero Ignacio Ortúzar, representando al clero de Santiago; José Zabala, a nombre de los laicos y amigos; José Miguel Jordán en nombre de la familia, y el Presidente de la República
Ricardo Lagos, a nombre del Gobierno y del pueblo de Chile.
Tras el homenaje, el féretro con los restos de Fresno fue conducido por calle Catedral hasta la puerta del templo por calle Bandera, en donde fue leído el testamento espiritual de Fresno, que fue escrito hace cuatro años.
En él, monseñor Fresno agradeció a sus padres y hermanos por haberlo guiado por el camino de servicio, recordó el día de su consagración como sacerdote, y la visita del Papa Juan Pablo II, y pidió perdón por los errores que pudo cometer en su labor.
Con la "Letanía de los Santos" de fondo, y cuando eran las 18:30 horas, el ataúd fue ingresado a la cripta de la Catedral, ubicada en un subterráneo detrás del altar mayor, en donde fue sepultado el cuerpo del religioso, luego de que Monseñor Errázuriz hiciera una oración final.
Los restos de Fresno, así como de otros arzobispos de Santiago, permanecerán en esa cripta por poco tiempo, ya que se construirá una nueva debajó del templo, según anunció durante la ceremonia el encargado de la Catedral.
