"Mamá, no te vayas / papá ven a casa". La coda extensiva, progresiva, repetitiva y desgarrada en la canción "Mother" de 1970 recrudece en la voz de Lennon con otros versos peores: "Madre, tú me tuviste, pero yo nunca te tuve a ti" o "(Padre) Yo te necesité, pero tú no me necesitaste".
En 1945, el marino mercante Alfred Lennon, huyó con el niño nacido el 9 de octubre de 1940 en Liverpool, hacia Blackpool con la intención de llevarlo con él a vivir a Australia. Julia Stanley, su madre, de 30 años, interceptó el procedimiento. Entonces el pequeño John no sólo fue testigo de una violenta discusión entre sus padres, sino que debió responder a una pregunta imposible. Julia y Fred le pidieron que escogiera con quién de ellos quería quedarse. John dijo “con papá”. Julia abandonó la escena derrotada pero el niño salió tras ella por la calle. Fue el momento en que la madre, perdida en la noche y la inmadurez, entregó la custodia de John a su hermana mayor, la tía Mary Smith, a quien llamaban “Mimi”.
Con estricto rigor en la casa de Menlove Avenue de Liverpool y con permanente control en la escuela primaria de Dovendale, a partir de aquí Mimi asumirá la crianza. Lennon era un muchacho incorregible, altamente desafiante de la autoridad e intelectualmente superior al común de los jóvenes, aunque ello no se reflejara en el rendimiento escolar. Ya entonces su lengua filosa comenzaba a aparecer como un arma de autodefensa eficiente. A mediados de los años ’50, John Lennon era un teddy boy peligroso, un pandillero cualquiera, aunque en extremo sensible.
Por entonces reanudó su relación con Julia. Ella le mostraría sus primeros discos del rock and roll y le enseñaría a tocar el banjo. La complicidad creciente lo alejó de la tía Mimi, aunque John nunca se trasladó formalmente a vivir a la casa de la nueva familia de Julia. Tenía 17 años cuando la tarde del 15 de julio de 1958 Julia fue atropellada con resultados fatales. Fue el más triste de los abandonos en sus 40 años de vida.
Canción folk tradicional del puerto, que llegó a convertirse en himno silencioso de Liverpool. Narra la historia de una prostituta muy popular entre los marinos. John la escuchó por primera vez cantada por Julia pero sólo quedó grabada en el disco de los Beatles Let it be (1970).
Es uno de los más bellos panegíricos hechos canción: “La mitad de las cosas que digo no tienen sentido / pero las digo sólo para llegar a ti, Julia”. Julia murió en 1958 y John escribió esta pieza intimista diez años después para el disco blanco The Beatles (1968).
Después de la poética “Julia” Lennon parece sacar el grito de rencor tras someterse a la terapia primordial (“the primal scream”) en 1970. Entonces todo lo que antes fueron imágenes oníricas sobre la “niña del océano” y la “nube silenciosa” se transformaron en una cobranza de factura: la madre que lo dejó, la que no lo quería, la que murió en un accidente. Se editó en el disco Plastic Ono Band (1970).