Mariola Sepúlveda (El Mercurio)
El fantasma del descenso complica a la Universidad de Chile. En estos momentos, el cuadro azul estaría jugando el partido por la promoción para no perder la categoría.
Johnny Herrera se fue del club en 2019, peleado con la dirigencia. A la distancia, sigue pendiente del cuadro laico.
"Me tocó salir de la U porque traté de defender el club lo que más pude. Mira como tienen hoy a la U. No estoy en la U, pero me da una pena tremenda porque están haciendo las mismas embarradas de siempre. Esconder entrenadores, filtrar contratos", declaró el hoy arquero de Everton en radio Agricultura.
Fiel a su estilo, Herrera disparó fuerte: "Siempre he dicho que baje quien sea. Pero no quiero que descienda la U, más aún por decisiones que toman los mismos chupasangres de siempre".
"Hay decisiones que se toman en la U que no se entienden. Me da pena estar afuera y preocupado que el club no descienda. Decidieron poner a un monigote escondido en un clóset para hacer lo que los dirigentes querían. Son decisiones nefastas y recurrentes de hace cinco años", agregó.
El golero cree que en la U las puertas están cerradas para él, incluso si el club desciende a Primera B.
"Me agarré con varias personas. No entiendo porqué gente con tantas lucas no dan un paso al costado y se van de Universidad de Chile. Me quejé con Mario Conca por sapo. No tengo posibilidad de volver al club con la gente que está. Me llevo bien con (Cristián) Aubert, pero es muy difícil hacer trabajar en la U. Casi me hicieron un favor al sacarme. Era muy desgastante pelear con los que toman las decisiones", sentenció.