Este viernes, la Asamblea General del Colegio Médico (Colmed) decidió postergar para agosto las elecciones internas que estaban programadas para la última semana de este mes, en consideración a la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus y el rol clave que está jugando el gremio en ella.
De hecho, cuando restaban solo semanas para la realización de los comicios, solo se sabía de la intención de la actual presidenta de la organización, Izkia Siches, de repostular a su cargo. Mientras, los opositores a su gestión lentamente se han reunido detrás de la lista "Más Médico", liderada por el cirujano Renato Acuña.
De acuerdo a fuentes al interior de la entidad, el potente rol que ha ejercido Siches en la crisis del covid-19, en la cual ha posicionado a la institución como la contraparte más creíble frente al manejo del Gobierno ante el avance de la enfermedad,
habría influido en la dispersión de sus detractores.
Un ejemplo de ello es el 48% de aprobación que obtuvo en una encuesta de Activa Research, que la consolidó como la figura mejor evaluada desde la llegada del coronavirus a Chile, y la amplia cobertura mediática que ha tenido en este periodo, siendo destacada incluso por medios internacionales, como la RFI de Francia.
Esos hechos han activado incluso un debate interno en distintos partidos de la centroizquierda, donde ven a la doctora de 34 años como carta para un cargo de elección popular, algo que ella ha rechazado en sus últimas entrevistas, recalcando que su principal objetivo es conducir al Colmed.
La dirigenta se ha esforzado en subrayar esa intención. Tanto es así que incluso ha elogiado la labor que está desarrollando la administración de Sebastián Piñera en la pandemia. "El Presidente esté mirando siempre los números y ha tenido una actitud muy proactiva", dijo ayer en entrevista con Radio Cooperativa.
Asimismo, desde la entidad destacan que la doctora aún mantiene gran parte del respaldo de quienes la llevaron a la presidencia en 2017, grupo compuesto principalmente por
profesionales jóvenes, generales de zona, quienes comparten el giro público que ha tomado el gremio.
Otro aspecto que destacan como positivo de la gestión de Siches es la apertura del colegio hacia temas que antes no eran abordados. Entre sus hitos, valoran la creación de un departamento de género, a través del cual han abordado asuntos de discriminación y diversidad sexual.
También subrayan el trabajo que ha entablado con otros gremios de la salud, las propuestas que han realizado sobre financiamiento de la salud pública, y los esfuerzos que han realizado para incentivar a que los nuevos médicos se queden en el sector público, pidiendo aumento de becas y cupos para generales de zona, entre otras acciones.
La mirada de la oposición
Sin embargo, pese a la buena imagen pública que mantiene, un sector del Colmed tiene una crítica visión respecto a la gestión de Siches, sobre todo por el supuesto "uso político" que a su juicio está haciendo la actual presidenta del gremio. En esa línea, apuestan por volver a poner el foco en los médicos.
Así lo explicó a Emol el propio Acuña, quien se desempeña en la Clínica Alemana y el Hospital Padre Hurtado, y que señaló que "pertenecemos a un grupo que estamos por que el Colegio Médico sea una entidad gremial y no un trampolín político, porque en este momento parece más un partido político de oposición que un gremio".
"Más que dirigentes, tenemos comentaristas de distintos programas. ¿Y qué ha pasado con los médicos los últimos años? Si preguntas cuánto subió el bono Fonasa, cuánto subieron los honorarios, cuánto aumentaron los beneficios,
eso no ha tenido mucha importancia", añadió.
En ese contexto, el doctor de 63 años criticó que "a Izkia le encanta hablar de transparencia y pedir números al ministerio, pero nosotros tuvimos que llegar a pedir una auditoria forense para saber qué estaba pasando con los fondos del colegio".
"Por ejemplo, no sabemos cuánto se gastó en el departamento de DD.HH. en el estallido social. El colegio puede tener una unidad de DD.HH., pero eso qué tiene de gremio. Por eso un grupo de médicos, ex dirigentes, como Enrique Paris, se están preguntando qué se ha hecho en beneficio de los médicos y no hay respuesta", dijo.
Asimismo, recalcó que "el colegio debe ser para los médicos y por los médicos. Hay que recuperar el club de campo, que está con deudas y cerrado por un problema eléctrico por dos años y si la directiva hubiera puesto el mismo empeño que puso en DD.HH. y en los puntos de prensa, tendriamos un club de lujo".
"Pertenecemos a un grupo que estamos por que el Colegio Médico sea una entidad gremial y no un trampolín político".
Renato Acuña, cirujano
El doctor relata que el grupo se comenzó a reunir poco antes del inicio de la crisis social, hecho que retrasó su coordinación. "Después vino la pandemia y quedamos cojos, no hemos tenido que juntar por videoconferencia, pero
llevamos por lo menos unos cuatro meses", dice, junto con destacar que las dos listas que compitieron en 2017 contra Siches, una de ellas de centroderecha, ahora están unidas.
Acuña, cuyo padre fue un antiguo presidente del gremio, asegura que no tiene ninguna filiación política. "Nunca he militado, pero soy de centro democrático. Cuando estuvo Enrique Accorsi y Juan Luis Castro me estuvieron sondeando para que me integrara a sus mesas y me trataron de pololear cuando se presentó Emilio Santelices", destaca.
En cuanto a la competencia, advierte: "Una cosa es lo que piensa la opinión pública y otra cosa es lo que piensan los médicos. Cuando hay elecciones, gana el que tiene más votos, y en este momento vamos a tener que hacer una campaña inteligente para recuperar el colegio, hay muchos que se han salido porque sienten que es muy político".
