El caso de la agresión a Guillermo Oyarzún, conserje de Vitacura, parece estar lejos de terminar, al menos respecto a lo judicial. Esto, luego que el imputado por el delito de lesiones graves,
Martín de los Santos, saliera del país días antes de la audiencia de revisión de sus medidas cautelares.
El lunes, el imputado participó de la audiencia vía telemática, instancia que estuvo marcada por su controvertida actuación, donde fumó, tomó mate e increpó a la jueza Cecilia Villanueva, del 4° Juzgado de Garantía de Santiago, por cambiar su medida cautelar que se le dio en primera instancia de firma mensual y prohibición de acercarse a la víctima, a prisión preventiva.
Pero debido a que en la primera instancia no se le ordenó arraigo nacional, De los Santos pudo salir del país sin mayores problemas.
Este miércoles, el ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, confirmó que existe una alerta de captura internacional para el imputado, lo que significa una orden para localizar y detener a De los Santos.
¿Qué escenarios posibles enfrenta el imputado en caso de ser capturado y cómo sería su proceso de retorno al país? Consultados por Emol, expertos abordan las implicancias de la huida.
Escenarios posibles
En el escenario de que Martín de los Santos efectivamente haya aprovechado de salir del país mientras no tenía la cautelar de arraigo, ya da cuenta de un primer error en la trama, dice Cristián Riego, abogado penalista de la UDP, es que se le haya permitido comparecer vía telemática.
Respecto a las sanciones, el experto afirma que en caso de que De los Santos sea detenido, "las posibilidades de poner término a la prisión preventiva van a ser nulas, va a ser muy difícil que él pueda acceder a que se libere", respecto a esa cautelar.
"Sobre efecto que su fuga pueda tener en la pena, sería más difícil pensar que pueda tener alguna agravante. Sí podría tener implicancias en acceso a beneficios, como alguna salida anticipada o al momento de discutirse una pena alternativa -rebajar años de prisión, por ejemplo-, el dato de su fuga sería relevante".
Cristián Riego, abogado penalista UDP
Esto, considerando que el delito de lesiones graves que se le imputa no tiene penas tan robustas. De acuerdo a la normativa chilena, las lesiones graves son penadas con presidio menor en su grado medio (541 días a 3 años) si es que producen en la víctima enfermedad o incapacidad para el trabajo por un tiempo mayor a 30 días.
En tanto, son sancionadas con presidio mayor en su grado mínimo (5 años y 1 día a 10 años) si es que dejan a la víctima demente, inútil para el trabajo, impotente o impedida de algún miembro importante o si la persona queda con alguna deformidad.
"Ahora, sobre efecto que su fuga pueda tener en la pena, sería más difícil pensar que pueda tener alguna agravante. Sí podría tener implicancias en acceso a beneficios, como alguna salida anticipada o al momento de discutirse una pena alternativa -rebajar años de prisión, por ejemplo-, el dato de su fuga sería relevante, y a partir de eso se le podría negar el beneficio y ordenar que se cumpla la pena en su totalidad", precisa el abogado.
Ahora, si se hubiese dado el caso de que escapó de Chile después de su audiencia de revisión de cautelares, el escenario se complica, puesto que ahí quedó con orden de cumplir prisión preventiva. "En ese caso, él habría infringido diversas órdenes y opera el desacato o vulneración de una medida cautelar", dice Riego.
En esa línea, reitera que fue llamativo que el imputado hubiera contado con la posibilidad de comparecer vía telemática, y aún "más extraño sería que lo hubiera hecho desde el extranjero, porque el tribunal se habría tenido que dar cuenta de dónde estaba esa persona. Los computadores pueden otorgar esa información, a menos que estuviera utilizando un VPN o algo así".
Es decir, "si además, el tribunal no verificó que esa comparecencia telemática no era desde Chile, eso me parece mucho más complicado", agrega.
¿Expulsión o extradición?
En el caso de que el imputado sea detenido y esto ocurra, efectivamante, en Brasil, Riego comenta que "el gobierno de ese país puede expulsarlo directamente, como suelen hacer en ese tipo de casos".
"Ahora, si ya la persona está viviendo allá, que no creo que sea el caso, puede ocurrir que contrate a un abogado, un juez impida ese procedimiento de expulsión, o esté bajo algún régimen de residencia, claro, ahí tendría que haber una extradición", precisa.
Pero en este caso, De los Santos, eventualmente con domicilio en Chile y en calidad de prófugo, "lo más probable es que el gobierno brasileño lo expulse inmediatamente. Eso es lo que uno ve como práctica habitual".
En la misma línea, Gustavo Beade, abogado penalista de la U. Austral, añade que una vez localizado, el imputado será detenido por la policía del país correspondiente "de manera inmediata (..) Las alertas de Interpol generalmente demoran un tiempo en ejecutarse, pero cuando se cumplen son muy efectivas".
Añade que "cualquier persona que está viviendo fuera del país tiene dificultades para poder tener una vida normal, vivir escondiéndose, no poder hacer ningún trámite, no poder conseguir trabajo formal. Es difícil, por lo que no pareciera que pueda permanecer mucho tiempo en esta situación. En general las personas que pueden vivir con más tranquilidad son las que cometen delitos más graves".
