Llegaron a Viña del Mar poco menos que pidiendo disculpas: “Al público Jaivano no le gusta que vayamos al Festival. Por eso les vamos a ofrecer un recital especial, también en la Quinta, la próxima semana”, dijeron al suplemento "Wikén". En esos mismos días aparecía el disco "Aconcagua", y el show del grupo se basó de modo importante en esas canciones, que aún nadie conocía. Pese a ello, la recepción fue abrumadora, con la galería y la platea llenas hasta pasadas las dos de la mañana, un hecho inédito en la historia del Festival. Era el año del auge de Zalo Reyes, y los periodistas intentaban crear una verdadera polémica entre los roqueros auténticos y los postizos. “¿Qué les parece que Miguel Piñera cante canciones de Los Jaivas”, le preguntaron al grupo en la conferencia de prensa. “Nos parece bien”, dijeron ellos. “En cierto modo, nosotros también somos "cebollientos" como Zalo Reyes. Pero nosotros no nos emocionamos con el "te fuiste, volviste", sino con la cordillera ,las raíces, la patria".