Y después ¿qué?

La Constitución del Principado establece que la sucesión se efectúa por orden de primogenitura con prioridad masculina para el mismo grado de parentesco y exige la nacionalidad monegasca. El tratado de amistad que rige las relaciones entre Mónaco y Francia desde 1918 estipulaba que la corona sólo podía ser para un monegasco o para un francés aprobado por el Gobierno francés, pero el acuerdo ha sido recientemente reactualizado.

Después de Alberto, y si éste muriera sin hijos, se encuentran en la línea sucesoria Carolina y Estefanía. El siguiente varón es el hijo mayor de Carolina, Andrea.

¿Necesitará Alberto su propia estrella de cine para dejar de ser el más codiciado de los reales solterones europeos?.