¡Atención, cabras del planeta, bajen de sus cumbres y venga a pastar un rato por los valles! Es tiempo de cambiar; soltar exigencias, apego a su imagen, la prisa e ideas fijas. Eso es lo que practicaron el ciclo anterior, ¿o anduvieron perdidas por los cerros sin rumbo? Esto no estaría mal si fue por practicar flexibilidad y explorar, ¡genial! Pero si es por evadir, 2016 tirará sus orejas, las hará revisar con el corazón dónde están, hacia dónde quieren ir y cómo lo lograrán.

Igual tienes permiso del cielo para subir a tu montaña, pero no a tus usuales escaladas algo frenéticas buscando más y más, sino para contemplar tu vida desde arriba y tomar mejores decisiones. El punto clave de 2016 es volverse creativos, muy chispeantes, con más apertura para mirar lo que sucede y lo que necesitan. Nada de viejas fórmulas. Júpiter y Urano los invitan a sacudir sus cabezas para conectar más con su inteligencia física y emocional que puede sorprenderlos, revitalizarlos y traerles reconocimiento.

Aguante con las verdades. Muchas –propias y cercanas- terminarán de salir a luz para pisar terrenos más claros y sentir que vives con autenticidad. Este año es muy directo, sin rodeos, lo cual favorecerá sus decisiones y proyectos. Suelten la creencia de estar contra el tiempo (es un espejismo del ego); cada logro será a su tiempo y con apoyo, más disfrutado, con buenos aprendizajes. Gente profunda o con una mirada distinta puede introducirlos en conocimientos nuevos que les den respuestas a su presente.

No rechacen ciertos imprevistos, pueden ser tremenda bendición. La alegría y la pasión los llaman a sacudirse el cansancio o los pesos de ciertas responsabilidades, especialmente en el segundo trimestre. Podrán encontrar algún pasatiempo que los reactivará y más de alguna amistad del pasado –o familiar lejano- puede traerles buenos momentos. Necesitarán asesoría en temas financieros y legales que pueden demorar y hacerlos practicar aceptación.