Honda está en un momento de cambio generacional. Ahora le toca el turno al CR-V, cuya nueva generación se estrenará en este Salón de París. La edición 2007 del modelo tiene un diseño completamente nuevo, con una anchura incrementada en 3,5 cm mientras que la longitud es menor en casi 9 cm, principalmente a causa de la relocalización del neumático de repuesto desde el parachoques trasero a la parte inferior del compartimiento de carga.

El nuevo CR-V tendrá en Norteamérica y Japón un propulsor de 2,4 litros y 166 HP asociado a una caja de cambios automática de 5 velocidades. Esto es, 10 caballos más que los disponibles para el modelo 2006.

Mientras, en Europa estará propulsado por uno de gasolina de 2,0 litros y otro de diésel de 2,2 litros, según fuentes de Honda citadas por la agencia japonesa Kyodo.
El vehículo es promocionado como un todoterreno con un centro de gravedad bajo que proporciona, según la empresa, "un funcionamiento semejante al de un sedán", lo que incluye bajo nivel de ruido interior, gracias al uso intensivo de nuevos materiales de aislamiento.